La historia de Sana Starros es una trama que se desarrolla bastante bien y me gusta cómo Ireland ha construido la historia hasta ahora. Se apoya en una rápida acción inicial familiar para captar la atención, pero la mayor parte se dedica a explorar las relaciones y dinámicas familiares más adelante sin profundizar demasiado en ellas para que parezca más natural. El resultado final de esta miniserie súper indispensable para todo amante del Universo Expandido de Star Wars es, es algo que se mueve continuamente y nos hace aprender cada vez más sobre lo que impulsará a estos tomitos independientes pero de los que dependemos muchos para quitarnos el gusanillo de leer/saber cada más y más sobre La Guerra de las Galaxias. Muy buenos cómics para quitarnos el gusanillo para los que llevamos tiempo esperando más Star Wars. Este cómic que recién publica Planeta Cómic en nuestro país, te engancha desde muy pronto. Después de una serie de decepciones, Sana Starros regresa a la casa ancestral de su familia para descansar un poco, pero el tiempo en familia está lejos de ser relajante. Especialmente, cuando los soldados de asalto se cuelan en la cena… ¡Tenéis que ver como Justina Ireland y Pere Pérez llevan a Sana Starros a lo más alto! Esperad. Lo cuento mejor.
Después de sus hazañas con la Doctora Aphra y Crismon Dawn, Sana regresa a la casa de su familia y se reencuentra con su prima, su tía y su abuela. Sin embargo, las cosas no son tan tranquilas y relajantes como esperaba, ya que su prima revela que está embarazada del hijo de su esposo imperial, lo que pone a Sana y a toda su familia en la mira del Imperio. Así empieza el lío.
Este cómic que hoy os reseño es la primera serie en solitario de Sana. Un cómic que logra ofrecer la suficiente información sobre la historia del personaje y al mismo tiempo usa esa trama para mantener al lector involucrado en el presente de Sana, además de encender una misión emocionante. Y es que al igual que la serie de televisión de Andor (¡Qué ya tiene fecha su segunda temporada!), estamos ante una historia que explora también a ciudadanos aparentemente promedio que intentan existir en un momento en el que el Imperio estaba llegando al poder. Sana Starros parece estar explorando de manera similar las áreas grises de la vida bajo el gobierno fascista del Imperio y las luchas de menor riesgo que vienen junto con él. Aunque el cómic presenta algunos de los conflictos esperados que hemos visto en otros cómics de Star Wars centrados en villanos y contrabandistas, estos pequeños ajustes sobre las relaciones imperiales aportan bastante como fondo informativo al lector. Y da finalmente a Sana Starros un acabado genial, a uno de los personajes secundarios más atractivos del Universo Expandido.
Una narrativa digna de sus complejidades y encanto.
De ahí mi recomendación.