Reseña: Viuda Negra. Juego Sin Restricciones, de Jen y Sylvia Soska

En breve, cuando todo vuelva a la normalidad, llegará a los cines el nuevo film Marvel de la Viuda Negra. Sabemos que siempre fue un personaje secundario, quizás hecho para los que nos gustaba el género negro en formato cómic, pero no queríamos alejarnos demasiado del pijameo. Y cierto y verdad es, que es un personaje de cómic que protagonizó en su día muy buenos arcos. Y que duda cabe que en cine (con una Scarlett Johansson deslumbrante) se terminó por relanzar a esta villana, heroína para el público de a pie. Convirtiéndose easí n uno de los personajes favoritos de los fans del Universo Cinematográfico Marvel, una Natasha Romanoff que siempre-siempre gusta ver en acción. Pero, ¿quién es ella? ¿Por qué es tan querida? ¿Qué papel juega exactamente? Según la versión cinematográfica de Los Vengadores, es miembro fundadora del grupo superheróico, pero esta doble agente secreto rusa que opera en la películas bajo las órdenes de S.H.I.E.L.D. oculta un pasado tenebroso y los interesados deberían saber bien quién es…

Actualmente, en Panini Cómics se pueden encontrar tomitos interesantes con arcos o miniseries del personaje, como la Viuda Negra, de Mark Waid, que  ya reseñamos por aquí o este Juego Sin Restricciones que traigo hoy. Pero cierto es, que en este país no hay muchos títulos con los que ponerse al día; aunque que duda cabe que cuando el estreno de la película “se consiga”, vendrán bastante titulos más. Entre los que espero unas buenas reediciones de la aventura clásica Viuda Negra: Red de Intrigas (una antología con material clásico y selecto de la espía) o los dos volúmenes del 100% Marvel Viuda Negra (una colección editada y publicada en torno a la época de Marvel Now!) que aquí se dividieron en tres volúmenes: Los Delicados Hilos de la Telaraña, Enmarañada Telaraña y Los Últimos Dias de la Viuda Negra. O los tomos La Más Buscada de S.H.I.E.L.D, No Más Secretos o aquella joyita Viuda Negra: El Nombre de la Rosa, que recopilaba el material publicado originalmente en Enter The Heroic Age y Black Widow V6, y que por lo visto ha servido de inspiración para lo que veremos en el nuevo film. Este último está claro que Panini Cómics lo traerá.

A lo que iba, que he devorado Juego Sin Restricciones de una sentada. Una buena aventura que ahonda en las profundidades del Mal con una Viuda Negra muy bien llevada, escrita por las hermanas Soska. Natasha Romanoff fue entrenada para matar. Durante años ha intentado superar esa programación, ponerse del lado de los “ángeles” para ser una heroína. ¿Y a dónde la llevó esto por culpa de uno de los pocos amigos verdaderos que se permitió tener? Es un tema delicado. Pero ha vuelto de entre los muertos, furiosa como el propio infierno, y encuentra que esos ángeles se hacen cada vez más ininteligibles. Jen y Sylvia Soska (las llamadas en USA, Gemelas Retorcidas del Horror) se unen con el ilustrador en ascenso Flaviano para tejer una trama, una red de vicios, violencia y venganza que pondrá frente a Natasha a uno de los tipos más sangrientos a los que jamás se haya enfrentado. Tal vez, para ponerla nuevamente bajo tierra. O no. No obstante, Juego Sin Restricciones abre con la víspera de Año Nuevo en la ciudad de Nueva York. Establece bien la relación entre Capitán América y Viuda Negra e inicia con una buena secuencia de acción. Las hermanas Soska hacen un buen trabajo devolviéndola a su base como espía, dirigiendo el programa y el Capi mostrando su respeto para que sepa que aún está en la cima. Pero a medida que se desarrolla la historia, con algunos giros muy interesantes y un eventual cambio de ubicación, todo se tornará en desgracia.

El arte de Flaviano con colores de Veronica Gandini tiene un ligero toque manga (muy leve) que no me atraía en un principio. Sin embargo, muy pocas páginas después me fue gustando el ambiente, el aire que toma la serie muy parecido a una peli animada, me adapté. Pero insisto, Sylvia y Jen Soska, las hermanas guionistas, son las que demuestran aquí tener una muy buena habilidad para atrapar al lector con lo que escriben y cómo lo escriben. Tomito ligero y llevadero para echar un buen rato con un cómic. Con lo que nos conformamos muchos.

Reseña: Hijos del Átomo, de Joey Casey, Paul Smith y Esad Ribic

El formato asusta. Vale. Pero qué te maravillas de todas-todas al tenerlo entre las manos, esa virtud no se la quita nadie a estos Grandes Tesoros Marvel que está publicando Panini Cómics. Como dijo alguien hace poco, este deleznable virus nos ha robado a seres queridos pero también dos meses de nuestra vida. Aunque parece que volvemos a ver la luz, poco a poco. Siempre fuimos ese tipo de gente que resurge con fuerza, capaz de recuperarse de lo peor, y recordad que los superhéroes están basados, sobre todo, en personas como nosotros. Es por eso que nuestras librerías, nuestros lugares preferidos donde obtener “mundos de evasión”, vuelven al candelero. Con editoriales como Panini Cómics, proporcionándonos lo mejor de lo mejor, con títulos geniales como este nuevo tomo gigantesco que recopila los seis números que compila la miniserie Hijos del Átomo. Esa joyita creada por Joey Casey para el mundo mutante de La Patrulla-X. Y es que las reedicioness así, siempre se recibirán con los brazos abiertos.

Joe Casey es un prolífico guionista de cómics estadounidense. Ha trabajado en títulos como Wildcats 3.0, Uncanny X-Men, The Intimates, Adventures of Superman y G.I. Joe: America’s Elite. Además, como parte del grupo creador de cómics Man of Action Studios, Casey fue  uno de los creadores de la serie animada Ben 10. Pero, sobre todo, ha elaborado numerosos títulos para DC y Marvel. En su día, Joe Casey solía promocionar Hijos del Átomo jurando que no era un nuevo reinicio mutante. Ni siquiera quiso escuchar esas palabras. Y se aprecia que fue muy cauteloso para que Hijos del Átomo no contradijera abiertamente cualquier cómic anterior, a esos inicios que todos conocemos. Pero finalmente tuvo que admitir que sí que quería cambiar cosas. Por ejemplo, los orígenes del elenco original estaban fuera de continuidad (a excepción de Ángel, que ese origen le encantaba). Y Casey defendió el tema en su día, citando a otras veces que se habían hecho mal, títulos que encima había sido reimpresos una y otra vez o incluso referenciados en otros cómics. Por ello, diseñó Hijos del Átomo. Algo diferente, en ese punto…

El agente del FBI Fred Duncan, un personaje olvidado del pasado, sirve principalmente como punto de vista para el lector. Duncan no parece tener una opinión muy sólida sobre el tema mutante, que es una de las razones por las cuales el Profesor Xavier considera necesario formar una sociedad con él antes que sea demasiado tarde. Es entonces cuando Casey retrata a Duncan como un cínico, pero no como un fanático, usándolo como portavoz plausible para el ciudadano promedio que acaba de descubrir que los adolescentes, aparentemente normales, tienen poderes horribles y los podrían usar de manera irresponsable. Pero los fans incondicionales de estas historias sabemos que Duncan es un tipo que sirve como contacto gubernamental para La Patrulla-X, así que el maestro guionista Joey Casey agrega una intriga para cogernos por la pechera… ¿Por qué Duncan habla constantemente con un amigo imaginario llamado «Bill»? Esperad, esperad, un momento. Me centro y lo cuento bien: El agente Duncan del FBI y su jefe están viendo un informe de noticias sobre mutantes. William Metzger es el líder de la Milicia Anti-Mutante. Discuten sobre el tema y éste indica a Duncan que investigue un poco. Cuando llega a su oficina, Duncan descubre que Charles Xavier también está allí y los dos tienen controversias sobre la verdadera intención del FBI. Mientras tanto, Warren Worthington III se pone su traje y patrulla la ciudad de Nueva York. Es entonces cuando percibe un atraco a punta de cuchillo, lo detiene y “deja caer” al agresor sobre un coche de policía… Warren se va volando y Magneto observa en las sombras.

Intrigas y desavenencias con el estado, son siempre los temas que perseguirán la vida de mutante. Me encantan las historias de inicio, pero en especial las que cuentan a modo de anécdotas la verdadera historia de lo que se quiere contar. Un ejemplo: se cuenta que los primeros X-Men solo fueron unas pocas docenas de mutantes en todo el mundo y ahora sólo se conocen tres que van a la misma Escuela Secundaria. Nos parece todo prosperidad. Hasta que aparecen los malos con malas intenciones. Es el tipo de conveniencia de la trama que no solo increpa a los personajes, sino también al lector. Y en estos detalles es muy bueno Joey Casey como guionista. Pues podría haber usado cualquier cantidad de artilugios para llevarnos a la historia de siempre. Sin embargo, recurre a un poderoso suspense y nos integra en una historia bastante profunda en Hijos del Átomo. Y esto, con un arte memorable de Paul Smith, Esad Ribic, Steve Rude, y en formato lienzo grande…, pues todo esplende.

Reseña: Howard el Pato, de VVAA

He querido degustar con paciencia y felicidad gustosa este maravilloso recopilatorio que Panini Cómics y SD se acaban de marcar, un tomo donde disfrutar del Pato Howard, Howard el Pato o como se llamó originalmente Howard the Duck. Un personaje que comenzó a aparecer en los cómics de Marvel casi cuando nunca nadie lo esperó, y el cual cayó muy pero que muy bien desde el principio. De hecho, desde que fue creado por el guionista Steve Gerber y el dibujante Val Mayerik para su primera aparición en el Adventures into Fear #19. Desde entonces, lo hemos ido encontrando en varias series donde se ha relatado su participación ya sea como personaje de reparto, secundario o sidekick, pero también como personaje principal. Todas las aventuras pero también las desventuras de este animal antropomórfico del cual decidí en su día hacerme con todas sus aventuras en cómics. Así que entonces, decidme friends de mi alma, cómo diablos no iba yo a hacerme con este maravilloso Marvel Limited Edition que acaba de publicarse en librerías donde se recopila todo-todito-todo de este «tío» que tiene casi tan mal genio como yo cuando está rodeado de humanos. Por eso me encanta el eslogan más común de sus cómics que dice: ¡Atrapado en un mundo que no es el suyo!

Un buen tomo que contiene por supuesto el Adventure Into Fear #19 pero otras muchas joyitas como el Man-Thing #1, Giant-Size Man-Thing #4 y #5 y Howard The Duck #1-#14 (la única serie que tuvo en solitario: JOYITA), así como el Annual #1, el Marvel Treasury Edition #12 y el FOOM #15. Un buen tomo de buenísimas lecturas donde encontrar a Howard El Pato desde su primera aparición, en la etapa desarrollada por el genio del cómic Steve Gerber, como dice la sinopsis editorial: una mirada lúcida, alienígena y animal de la América de los 70 y algo de los 80 donde tuvo su traslado, o lo encontramos reflejado también, en el glorioso cine friki que se realizó en aquella gloriosa década. Un tomo que es una edición limitada y que nadie se debería perder si ha leído hasta aquí.

Y es que las aventuras de Howard el Pato suelen inscribirse dentro de los cómics dedicados a la sátira social. Es decir, dentro de esos cómics que cuanto más mayor te haces, mejor entiendes y más sonrisas te sacan. Exempli gratia: Metropolitan o las aventuras de Lobo. Ese estilo. Aventuras con un gran componente de metaficción. Podríamos calificarlas incluso de relatos existencialistas donde la broma está muy presente. De hecho, alguien dijo: “Una película sobre un pato del espacio exterior… No tiene porque ser ninguna experiencia existencial”.

Y tenía razón. Puro palomiteo es lo que es.

La primera aparición de Howard en los cómics es cuando una fuerza invisible lo secuestra abruptamente de su planeta natal y lo deja caer al azar en los Everglades de Florida. Se encuentra con el Hombre Cosa, que había sido atacado por Korrek de Katharta, y los tres se enfrentan a los guerreros del Congreso de Realidades.

Así comenzó todo. Así se inició esta leyenda de personaje que llega incluso a debutar en el cine moderno en el UCM dentro de la saga de Los Guardianes de la Galaxia. Y… ¿He dicho que se llega a convertir en un detective privado de armas tomar?

Su mejor época.

Reseña: Matanza. Nacer de Nuevo, de Torunn Grønbekk y Pere Pérez

Web of Carnage no fue otra cosa que un buen estudio de un personaje moralmente ambiguo, sin embargo, su sólido análisis del personaje y la progresión de la trama relevante para la continuidad, se vieron debilitados por su excesiva exposición y monólogos, y su dependencia de ambos.

Salió publicada en el bendito verano de simbiontes que tuvimos unos años atrás y desde entonces tuvo un relativo éxito y acto seguido salió la minisere de Carnage, cuyos cuatro primeros números también se incluyen en este TPB que Panini Cómics publicó hace nada. Así que llegó por tanto la hora de volver a Matanza, me dije, el volátil simbionte, un prota que es un asesino en serie de los malos-malosos más malutos que te puedes encontrar en un cómic. Pues si alguna vez fue hospedado por el asesino en serie Cletus Kasady y brilló, con un poco de desarrollo de personaje y un examen de conciencia ahora que se ha librado de Cletus, este ser infernal empieza a ocuparse y a destripar toda una ciudad lamentablemente desprevenida con distintos grados de éxito. Por eso, Matanza tiene sed de poder como nunca antes. Su renacimiento no es otra cosa que una oportunidad de demostrar su valía a los ojos de todos sus compañeros simbiontes, y todo esto es lo que propone el famoso Matanza, de Torunn Grønbekk y Pere Pérez.

Empieza con una historia sencilla, en la que no sucede demasiado pero después pasa a un genial Born Again en toda regla. Un nuevo comienzo intrigante para todos los involucrados, que ayuda a lavar rápidamente el mal sabor de boca de la última huida del personaje. Porque dado el gemido con el que terminó la última serie de Matanza (Death Of The Venomverse y Carnage Reigns), me encontraba bastante escéptico sobre el lanzamiento de otra serie tan pronto. Pero aquí tenemos historias que se cierran, one-shot de apertura además que concluye algunos hilos de la trama de la serie de Ram V, antes de que la historia de Torunn Gronbekk comience en serio.

Ya he mencionado en alguna ocasión que Matanza nunca funciona como protagonista de una historia, al igual que el Joker (para mí) tampoco. Pero al igual que los últimos cómics en solitario de Carnage, Gronbekk aquí adopta un enfoque poco ortodoxo al presentar un nuevo personaje y tiene algo que llega engancha y llega a funcionar. El propio Cletus Kasady, ahora separado del cada vez más poderoso simbionte Carnage y completamente a su merced; además tenemos un Flash Thompson en segundo plano, lo que siempre es un placer para mí personalmente. Por lo que queda una lectura aceptable y continúa la trama del volumen anterior y muestra a Matanza lidiando con Jon Shayde y una aventura multiversal donde lucha contra Morlun y el veneno de ese mundo. Donde por cierto se da cuenta que necesita cambiar y no deja que las reglas de la red de la vida/destino le afecten.

Y cantidad de tramas de la conspiración que incluyen a los apóstoles de Jesucristo.

Esta colección da para que te pete la cabeza.

Reseña: La Guerra Vengadores-Defensores, de VVAA

Entre los números The Avengers #115-#118 y The Defenders #8-#11 tuvo lugar una guerra entre Los Vengadores y mi amado grupo de Los Defensores. Una batalla que recordaba apoteósica, ya sea por el momento, ya sea porque a muchos de los que andamos por aquí, de pequeños, lo que nos molaba, eran cómics donde superhéroes se dieran de ostias unos contra otros… Y no tenía porqué haber ningún villano de por medio. Las recurrentes preguntas eran: ¿Quién gana en una pelea, Hulk o Thor, el Capi o Namor? Bien, pues eso precisamente es lo que vimos entonces y ahora Panini Cómics recupera en uno de estos maravillosos Must-Have que se están publicando.

Los Vengadores llegan a Inglaterra en el Quinjet y se enfrentan a un agente del brazo británico de SHIELD que no quiere dejar entrar al criminal Espadachín en el país, pero acepta a regañadientes las garantías de Los Vengadores. El Quinjet aterriza en el castillo de Garrett, hogar ancestral del vengador británico Caballero Negro. Pero resulta que el equipo intentó ponerse en contacto con Dane Whitman cuando se dieron cuenta que estaban buscando ayuda contra Magneto. A lo que voy es que Los Vengadores encuentran una barrera invisible alrededor del castillo (que resiste el martillo de Thor y la intangibilidad de Vision). Es pura magia. Mas, el hechizo creado por la Bruja Escarlata tiene un pequeño efecto temporal. Es una barrera mágica. Mantis usa su poder empático para descubrir que la barrera fue erigida por el Dr. Extraño (en números anteriores de Los Defensores). Cuando, de repente, son atacados por trogloditas que salen de túneles ocultos en el suelo. Pantera Negra, Mantis, Scarlet Witch y Swordman son tomados por sorpresa y noqueados. El Capitán América, Iron Man y Thor son sometidos por gas y…

Este arco fue curioso. Como os comentaba antes, fue una especie de crossover (o uno en toda regla), una trama que se intercaló entre dos potentes colecciones o cabeceras de los años 70. De hecho, si no seguías las dos o tenías alguien que te los dejara, os aseguro que no te enterabas de nada. Suceden cantidad de cosas por página. Una tras otra. A groso modo, lo que ocurre es que existe una conspiración creada por Loki y Dormammu donde estos dos liantes de cuidado se las ingenian para desatar una guerra entre Los Vengadores y Los Defensores. O lo que es lo mismo, la excusa perfecta para que Steve Englehart y Sal Buscema, en el mejor momento de sus carreras, ofrecieran un crossover que se quedaría grabado en la memoria de millones de lectores.

Un tomito que se disfruta a tope. Magia, acción, viajes a una época medieval con superhéroes enfrentados, cómics clásicos que hasta hace no mucho solo se podían encontrar con páginas atadas con cuerdas en librerías de viejo. Gran cómic y gran arco vuelto a la vida.

Con unos dibujos de Bob Brown que pueden volverse extraños a veces pero que te llevarán a la nostalgia de nuestros benditos años 70 y 80. El Capitán América, Iron Man, Thor, Ojo de Halcón, el Doctor Extraño, Namor, Hulk, Estela Plateada… Ideal para descubrir que pasaría si chocaran unos con otros.

Buena recuperación, sí, señor.

Reseña: Los Inhumanos, de Jack Kirby, Stan Lee y VVAA

Otra de las ideas maravillosas que ha tenido Panini Cómics, es la de publicar unos pequeños Marvel Limited Edition con colecciones pequeñas de títulos difíciles de encontrar o lo que es lo mismo, sendos cómics clásicos que son una maravilla a la hora de tenerlos en formato ligero, llevadero, muy buenos para degustar donde plazca. Y entre ellos se encuentra este primer volumen de Los Inhumanos, cuya recomendación casi que sobra. Todos los números reunidos donde tuvieron lugar estas aventuras de Los Inhumanos (The Mighty Thor #146-#152, What If #29 y #30, Marvel Super Heroes #15, Amazing Adventures #1-#10 y The Avengers #95). Las aventuras clásicas de Los Inhumanos, reunidas en dos volúmenes del que ya tenemos esta primera joyita en librerías. Y para el que no los conozca decirles que Los Inhumanos (Homo sapiens inhumanus) son un grupo de superhéroes que aparecieron por primera vez en el Fantastic Four #45 (diciembre de 1965), aunque Medusa y Gorgon ya habían aparecido en números anteriores de dicha serie (en el #36 y #44, respectivamente). E incluso su centro de reunión en la ciudad de Attilan, fue mencionado por primera vez años antes, en una historia de Tuk the Caveboy escrita y dibujada por el propio Kirby que apareció en el Captain America Comics #1 de marzo de 1941. Una ciudad descrita como el hogar de una raza que se desarrolló evolutivamente cuando los seres humanos todavía estaban en la Edad de Piedra.

En este pequeño MLE nos encontramos con los seis primeros números escritos y dibujados a lápiz por su coautor Jack Kirby. Donde nos llevan al comienzo de la Guerra Kree-Skrull, hace millones de años en el tiempo de la Tierra, cuanso el alienígena Kree estableció una estación en el planeta Urano, una posición estratégica entre los imperios Kree y Skrull. Y es que a través de su trabajo en esta estación, descubren que la vida en la Tierra cercana tenía potencial genético invertido en ella por Los Celestiales. Intrigado, entonces el Kree comienza a experimentar con el entonces primitivo Homo sapiens de la Tierra para producir una raza inhumana genéticamente avanzada. Cuyo objetivo tiene dos caminos: investigar posibles formas de eludir su propio estancamiento evolutivo, así como crear una poderosa raza de soldados mutantes para usar contra los Skrulls.

Y aunque sus experimentos tienen éxito en la creación de una cepa de la humanidad con habilidades extraordinarias, los Kree abandonan su experimento porque una profecía genética predijo que esos experimentos conducirían a una anomalía que destruiría la Inteligencia Suprema Kree. Y una vez asignado, ningún Inhumano, sin importar cuán grande o poderoso sea, puede cambiar su lugar dentro de este rígido sistema de castas. Sin embargo, como excepción, un miembro de la Familia Real, Crystal, se llega a casar con el mutante Mercurio (Quicksilver) y entonces se lía parda…

Los Inhumanos son liderados por su rey Rayo Negro (Black Bolt), y la denominada Familia Real la comprenden: Medusa, Karnak, Gorgon/Gorgón, Tritón, Crystal, Máximus el Loco y el grandioso perro Mandíbulas (Lockjaw). Tenemos así una miniserie súper chula que todo el mundo debería leer al menos una vez en la vida. Con detallitos que tanto jóvenes, como viejóvenes, encontrarán en temas como que Crystal y Medusa llegaron a ser miembros de Los 4 Fantásticos; incluso Crystal perteneció una vez a Los Vengadores. Recomendable, porque aquí se halla la reconstrucción de los orígenes y las primeras aventuras en solitario de la más fascinante raza de súper-humanos, a cargo de Stan Lee y Jack Kirby. Y de seguidas, la llegada del formidable equipo formado por Roy Thomas y Neal Adams.

Una saga indispensable para todo el mundo.

Reseña: Spiderman. Espíritus de la Tierra, de Charles Vess

Espíritus de la Tierra es una novela gráfica escrita e ilustrada por el gran Charles Vess. Uno de los mejores artistas del fantástico del siglo pasado. Vess es un gran artista y aquí volvió a demostrar que también podía ser muy buen escritor (ver sus sagas Balads). Pero en el caso de esta aventura del trepamuros enseña lo asombroso que podían ser sus dibujos cuando quería. ¿Qué pasa? Que en su día muchos se quejaron de que esta historia se quedaba corta. Los fans de siempre estamos acostumbrados a seriales largos con arcos argumentales que se extienden algunos hasta la saciedad. Sobre todo, dentro de la cabecera de un mismo personaje. Pero después, estas historias quedaban muchas en nada, se apagaban al poco en la memoria, y rara es la que se recuerda hasta que no llegaba una nueva edición. Espíritus de la Tierra lo que demuestra es que, si lo breve es bueno, dos veces bueno.

Peter y Mary Jane, felizmente casados -como Dios y Stan Lee siempre desearon-, viajan a Escocia, donde encuentran un entorno mágico pero lleno de caos. Cruzar los páramos con telarañas no es lo mismo que balancearse por Manhattan. Por eso cuando aparece el Club del Fuego Infernal, nadie lo espera. Dos tortolitos enamorados que buscan un viaje de información familiar y descanso en el hogar de sus ancestros, no encuentra otra cosa que fantasmas en el pasado MJ aflorando en tierras escocesas.

Este titulo, como otros de la colección de novelas gráficas protagonizadas por Spiderman, describe perfectamente por qué Marvel nunca «lo entendió» en los años 90. Simplemente, las tramas no podían crecer más allá de los dibujazos enredados de telarañas que Todd McFarlane aportó al mundo. Por encima de muchas de las tramas creadas para la cabecera de entonces, quedaron cuatro tramas que lo encumbraron en mi opinión: Hooky, Parallel Lives, Fear Itself y este Spirits of the Earth. Todas, básicamente versiones más concentradas de las típicas historias de Spidey, aunque con mejores dibujos en un par de casos. Así que lo que decía. Lo breve si bueno, dos bueno. Eso encaja aquí a la perfección. Quitando que el editor Jim Salicrup debería haberse abstenido de sus molestas notas a pie de página que traducen el escocés al inglés y por tanto al español… Tenemos una buena historia y un buen cómic que es encantador de hojear, y en ocasiones, sin necesidad de leerlo.

Y es que me gustan este tipo de historias únicas donde tienes a un superhéroe, su trama, principio y final del cuento; una trama que devoras, un bocadillo que te comes junto a tu bebida, quedas satisfecho, y a otra cosa mariposa. Como poco, recomendable.

Reseña: Los 4 Fantásticos. 1 2 3 4, de Morrison, Jae Lee y José Villarrubia

Lo que me ha gustado muchos de este Fantastic Four: 1 2 3 4 es que Grant Morrison intentó hacer algo diferente con estos personajes que para muchos están obsoletos. Lejos de grandes tramas con grandes autores en los benditos 80s, ya es difícil rescatarlos. Pero, al menos, aquí se consiguió. Y teniendo en cuenta que la MCU está apostando fuerte porque se revitalicen en el cine, no me queda otra que recomendaros este Must-Have que publicó Panini Cómics en este pasado agosto que se nos fue hace nada. Una miniserie que da más de lo que uno espera.

Una buena presentación de Morrison, que utiliza dinámicas de personajes sólidas para desmenuzar lentamente a Los 4 Fantásticos, con el Dr. Doom apuntando a dividir y conquistar. Tenemos así una historia que se construye increíblemente bien, lo que obviamente se debe a la gran cantidad de experiencia de Morrison. Me encantó la forma en que jugó con los miedos y complejos realistas de cada miembro en orden, trayendo a la Primera Familia a la Tierra para eliminarlos, lo que es un buen contraste con el tiempo que pasan en las estrellas o saltando por realidades alternativas… Cada capítulo de esta excelente miniserie escrita por el legendario Grant Morrison e ilustrada por Jae Lee (Los Inhumanos) se centra en un miembro del cuarteto cósmico mientras los mayores enemigos del equipo se unen en un asalto total contra ellos. Tramitas interesantes que nunca pierden el ritmo aunque sí que es cierto que le falta en su conjunto ese toque extra de empuje de Morrison que me gusta ver en su trabajo. En cualquier caso, una de las historias de Los 4F más originales y sólidas que hay. Merece la pena conocerla.

Con los dibujos de Jae Lee tan geniales como siempre, agregando un paisaje oscuro y semi-retorcido para esta batalla principalmente mental, tomándose algunas libertades propias con la narrativa visual que realmente se suma al conjunto. Conocido por sus entornos ásperos y sus figuras silueteadas, el artista Jae Lee es ideal para el oscuro guion de Morrison, ya que presenta una Nueva York decrépita y fea con sus lugares de hormigón que parecen desmoronados, mientras que el icónico Edificio Baxter, a pesar de su exterior futurista, parece viejo. A lo que suma que, quitando los trajes azules brillantes de nuestros héroes, José Villarrubia utiliza muchos colores apagados que parecen apropiados para el contenido de la miniserie, mientras que los diseños dinámicos de las viñetas de Lee permiten impresionantes splash-pages.

1234 es un intento interesante de deconstruir la Primera Familia de Marvel, algo que Warren Ellis hizo brillantemente en Planetary. No sé si es un Must-Have en toda regla, pero yo no me lo perdería si quieres algo interesante de Los 4F recientemente publicado.

Reseña: MASACRE, de Skootie Young, Nic Klein y Scott Hepburn

Se hacía indispensable tener ya un tomo recopilatorio con el Deadpool, de Skootie Young. Sin duda, el ilustrador y dibujante de cómics que mejor representa el cachondeo y el humor con sus trazos, así como un autor que lleva más de diez años trabajando para empresas de entretenimiento y editoriales como Marvel, Warner Bros., Image, Upper Deck, Mattel y muchas más. Y que son famosas sus obras de las novelas de Oz, de L. Frank Baum, que han sido nominadas al Premio Eisner y han sido superventas según el New York Times, junto con el escritor Eric Shanower. Bien pues Panini Cómics nos trae este Marvel Deluxe que recopila los quince números que junto a Nic Klein y Scott Hepburn realizó este magnífico autor.

Y Masacre… ¡tan Deadpool como siempre!

Como os decía, Skottie Young destaca por aportar humor, como saben los fans de sus obras. Aquí, entre otras tantas historias, un ser cósmico de gran poder amenaza con destruir la Tierra, y solo Masacre puede detenerlo, por mucho que los Vengadores deseen lo contrario… No obstante, nuestro Deadpool está de vuelta en el negocio de matar cosas vivientes por dinero pero una amenaza alienígena masiva que golpea Nueva York… eso mola, es otra cosa. Además, todos los superhéroes recurren a Deadpool, ya que tiene la única arma que puede matar a la cosa alienígena. Pero,  ¿en serio? ¿Podría uno molar tanto de la noche a la mañana sin comerlo ni beberlo? Aquí debe de haber algo engañoso…

Un buen lote de grapas repletas de buena acción, intensas y sorprendentemente sangrientas. Lo que siempre ha caracterizado a este personaje de Marvel. Historias muy barrulleras, como se suele decir, pero que enganchan a la lectura por ser palomiteras a cascoporro. Y no tan predecibles como muchas veces se espera de este tipo de personajes. No. Tenemos aquí algunas sorpresas bastante chulas y el final de este volumen es bastante bueno. El arte es mixto. A veces, bueno y a veces, regulero. Pero en el humor, por lo general, Deadpool ya es divertido de por sí y Young suele escribir buen humor, así que todos los chistes de este libro realmente funcionan bien. A veces es divertidísimo, y otras veces aguanta el tipo y poco más; esa mala sensación de que están tratando de meter un chiste forzado en cada viñeta. Pero bueno. Si eres fan de Masacre, la trama o subtramas son secundarias y el dibujo te lleva de la mano hacia el humor que rompe la cuarta pared y todos los gags visuales que a los fans de los cómics-geek nos molan. Por ejemplo: el traje de Deadpool se quemó, pero está desparramado casualmente en una silla de oficina, con su entrepierna estratégicamente cubierta por una figura de acción parada sobre un escritorio en primer plano. Un gag que se realza si reconoces que la figura es Man-Thing… Este tipo de detalles son los que a algunos nos encantan.

Si no eres fan de Masacre, este tomo probablemente no te hará cambiar de opinión. Pero para los fans acérrimos de Deadpool, que encima estamos ahora con la adrenalina a tope tras la recién estrenada y maravillosa Deadpool y Lobezno, tenéis aquí un Marvel Deluxe totalmente recomendable.

Reseña: Kaos y Lobezno. Fusión, de Louise y Walt Simonson, Muth y Williams

Cuando lo vi entre las novedades, me llamó la atención y recordé algo que tenía pendiente. Y era la lectura de este tándem entre Lobezno y Kaos. Pero lo que hizo que quisiera leer si o si este 100% Marvel HC que recién publica Panini Cómics fueron dos cosas: lo había dejado pasar en su día (es una historia de finales de los 80). Y lo segundo es que no recordaba que Fusion fuera una trama salida de dos grandes guionistas como son Louise y Walter Simonson. Una pareja mítica que me ha otorgado grandes lecturas, algunas muy épicas.

Cuatro numeritos con un arco donde tener como protas a dos amigos, dos mutantes, dos miembros de La Patrulla-X, que lo van a pasar realmente mal después de que ambos sean emboscados en México por terroristas rusos y se vean atrapados en una red de traición e intriga internacional. Cuentan que leer esta trama a finales de los 80s provocaba una especie de shock. No pude leerla entonces ni después, pero la tenía presente en mis deberes. Así que intenté situarme en aquellos tiempos (que sí viví) y me encontré un arco particularmente impresionante, una partida de ajedrez posterior a la Guerra Fría con el trasfondo de Chernóbil. Trata el tema del desastre con dos superhéroes que llegan a estar a punto de caer, sobre todo, mentalmente, por lo que supone acarrear con miles de víctimas tras de ti. Esto pone los pelos de punta. Aparte, los fans de Lobezno, van a encontrar aquí una de las mejores interpretaciones del personaje.

Por otro lado, ah, los buenos viejos tiempos de cómics pintados. Una historia que contó con el impresionante arte de Jon J. Muth y Kent Williams, quienes ofrecieron una obra pincelada capaz de producir insólitas atmósferas. Casi todas las páginas de Meltdown son lienzos dignos de los mejores museos Marvel. Estamos ante una historia que es, sobre todo, para disfrutar de sus dibujos. Kent Williams colocó un Lobezno desgarbado y salvaje con su estilo suelto característico, mientras que Jon Muth trabajó en un Kaos y lo hizo más etéreo, al estilo James Dean, con acuarelas impresionantes. Cabe recalcar que en aquellos tiempos, este estilo de dibujo era todavía una novedad e independientemente de si se adaptaba o no a la trama, estos llamativos experimentos visuales eran como golosinas si buscabas algo diferente. Aun así, admito que puede que no sea del agrado de todo el mundo. Por eso, por mucho que me guste el trabajo de Williams, por ejemplo, puedo entender perfectamente que su estilo suelto y desgarbado puede no gustar a todo el mundo. Según los estándares actuales, creo que ambos artistas son anacrónicos, pero si estás abierto a algo diferente, es posible que quieras probarlo y des con uno de los mejores cómics que solo deban estar en tu cómicteca por sus gráficos.

Lo que me dijo un colega bastante crítico en su día fue. “Olvídalo. Píllalo sólo como excusa para disfrutar del arte”.

Kaos posee la habilidad de disparar devastadoras descargas de plasma.

Lobezno es un guerrero salvaje con una capacidad única de sanar, un esqueleto irrompible de Adamántium y afiladas garras del mismo metal. Qué os voy a contar a estar alturas.

Un cómic legendario que no debí dejar pasar en su momento.