Por fin, en formato integral la serie del gran Bogavante Johnson; héroe pulpero total creado por el dios Mike Mignola, creador del denominado Mignolaverso. Un lugar, un mundo, un personaje en una serie de historias que sigo como perro a salchicha humeante y más si se publican en ediciones así donde poder tenerlo todo-todito-todo bien recopiladito en la comicteca. Al igual que hicieron con Hellboy, AIDP… por cierto, Norma Editorial, ¿para cuando un buen tomo integral de Baltimore? Bueno, a lo que vamos, que tenemos aquí un tomo que se disfruta mogollón y que aporta en primer lugar las historias anteriormente publicadas en TPB como son La mano ardiente, Satán se huele el pastel, ¡A por el Bogavante!, pero además se aporta el cuento corto e inédito hasta ahora La silla vacía. Resumiendo, una joyita en toda regla para los amantes del género pulp así como de todo lo que hace Mignola.
En La mano ardiente, al héroe pulp (que recuerda tanto a The Shadow), se le opone un poder sobrenatural que lucha a favor del gánster al que Bogavante quiere detener. El dibujo es excelente y suma a una emocionante historia.
En Satán se huele el pastel destaca muy mucho el dibujo de Kevin Nowlan. Con una historia en la que Bogavante Johnson se enfrenta a monos japoneses armados que… ¡Lo flipas! Hace que mole este tipo de pulp que se inclina hacia lo absurdo. Soy de la opinión que toda aventura con monos, gana.
¡A por el Bogavante!, es ideal para leer en una de esta noches tórridas de verano que tenemos encima. Tenemos a nuestro héroe en el centro de atención (después de salir de las sombras) y nos vamos de nuevo a tramas con gorilas cyborg, científicos locos, luchadores a control remoto y policías que no pueden decidir si nuestro héroe está de su lado o no. Un martes más en la oficina…
Lobster Johnson (como es llamado originalmente), si bien recuerda a La Sombra, es como un Capitán América a tope de prozak, con una visión corrupta de la ética y la moral. Un héroe pulp que juega en historias maniqueístas que, bueno, están desactualizadas o pueden parecerlo porque eso, my friends, es el pulp que tanto adoramos algunos. Tenemos un volumen que es un spin-off, justo lo que necesitas para pasar una tarde relajada en un mundo de aventuras que jamás existirá. Bogavante Johnson es un trabajo de Mike Mignola en la línea de Hellboy. La serie es un poco “a lo que salga” pero tiene un elenco variado de villanos desde «El Diablo» hasta los nazis que la hace indispensable para el disfrute. El propio Bogavante podría ser miembro de la AIDP, pero nunca se dice realmente. Me gusta el estilo único de Mignola en la historias con este personaje. Tiene una sensación muy pulp noir, muy difícil de encontrar en obras de calidad. Desde los escenarios hasta los colores apagados, el estilo de la ropa y el diálogo, tienen el sello distintivo de una novela por entregas de los años 40. Y eso no es trabajo fácil. Por eso, mi enhorabuena a los señores encargados del dibujo también. Y es que, probablemente, el Justiciero de la Pinza está hecho para ti.