Reseña: Mercaderes del Espacio, de Frederik Pohl y C.M. Kornbluth

En algún momento, la novela distópica se convirtió en tradición dentro de la Ciencia Ficción. Y es fácil ver por qué: las facetas que separan el género del resto de la literatura conducen a manifestar sociedades e ideologías en desacuerdo con la realidad social. Un Mundo Feliz, presentaba una sociedad en la que casi toda la humanidad se drenaba de “propia humanidad”; Fahrenheit 451, le arrebataba libros a la sociedad; 1984, imaginaba un mundo en el que la libertad personal se perdía por control del Gobierno, además de presentar un escenario donde el individualismo es aplastado bajo la esterilidad de la conformidad. Pero hay más porqués. Todos sobre Zanzíbar, Orbita Inestable o La Oveja Mira hacia Arriba, de John Brunner, son novelas distópicas que presentan diferentes facetas de permitir que la influencia corporativa usurpe las preocupaciones políticas y sociales. Congreso de Futurología, de Stanislaw Lem, mostraba una sociedad bloqueada por productos químicos. Y Mercaderes del Espacio, enseña como comercializar dentro de un escenario aterrador que estratifica a la sociedad de manera poco saludable. En definitiva, novelas con una potente carga social, con más de cincuenta años respecto a nuestra realidad, pero cuyos argumentos están demasiado cercanos. Historias de Anticipación, haciendo una fuerza honrada del significado de sus palabras.

Y es que la sociedad que Kornbluth y Pohl imaginan en Mercaderes del Espacio, se vuelve demasiado realista. Establecida nominalmente en el «futuro», las corporaciones han ganado suficiente poder para forzar los límites políticos para cambiar de lo geográfico a lo comercial. Estados que ya no están representados en el gobierno, los conglomerados empresariales y los mega-corporaciones compiten y cabildean ferozmente en su etapa más alta para garantizar que los productos se consuman y las ganancias sean súper elevadas. Y jugando el papel más importante en ello, están las Agencias de Publicidad. Capaces de usar cualquier método, el que deseen sin límites y poniendo los cinco sentidos recurridos en folletos, carteles…, y otros asuntos más turbios. ¿Un ejemplo? Productos que contienen en sí mismos altos elementos adictivos. Por lo que la riqueza se canaliza hacia la cima, la clase baja crece mientras que los ricos prosperan. Todos los servicios privatizados, incluso la capacidad de una persona para recibir protección civil se deriva a su capacidad de pago, incluyendo la propia policía. Los pobres consumen solo ingredientes de baja calidad, los países del Tercer Mundo suministran mano de obra a muy bajo precio a las potencias ricas, me cago en todo… Si es que esta novela de 1954 habla de nuestra sociedad actual.

Una sátira del capitalismo y del mundo de la publicidad que casi setenta años después se hace realidad. Y así nos topamos con la historia de Mitchell Courtenay, el mejor publicista de la Sociedad Schoken, y el encargado de elaborar la campaña publicitaria de un poderoso proyecto. El besar culos (por no ser más borde), emplear trucos del oficio y una capacidad instintiva para explotar las lagunas legales, lo han colocado como uno de los favoritos de Schocken. Y es así cuando llega un gran contrato, uno obtenido de manera cuestionable, en el que es elegido para encabezarlo. El Proyecto Venus. La humanidad está enviando a sus primeros humanos a colonizar a nuestro vecino verde-oscuro, y depende de Courtenay asegurarse de que contenga personas esa nave. Después de elegir a mano a su equipo, investigar la demografía y entrevistar al único astronauta que realmente ha puesto un pie en Venus, pone en marcha sus ideas. Pero tras una sucia maniobra de sus competidores en el que hay un intento de asesinato, el mundo de Courtenay se desmorona. Se verá relegado a los más bajos niveles de la sociedad, desde donde deberá ascender de nuevo acercándose (tal vez demasiado) al mundo del terrorismo y el sabotaje.

Mercaderes del Espacio no deja de ser una novela fascinante, llena de ideas, a pesar de los años. Un titulo indispensable de leer y que, por supuesto, aparece en la lista de Science Fiction: The 100 Best Novels, así como en la muy seguida Ciencia ficción: Guía de lectura del gran Miquel Barceló.

Reseña: Galápagos, de Kurt Vonnegut

Recordad que con la editorial Blackie Books estamos teniendo muy buenas opciones de hacernos con toda -o casi toda-, la bibliografía del siempre recomendable Kurt Vonnegut. Un autor que una vez lo descubres, querrás leer todo-todito-todo lo que brotó de una de las mentes satíricas y más brillantes que ha dado el mundo de la Ciencia Ficción. Y en Galápagos lo demuestra una vez más realizando un tributo irónico a lo planteado en su día por Charles Darwin.

Una novela donde sorprendentemente tenemos a un narrador que es un fantasma y que existe desde hace un millón de años y es testigo de todo lo que le va ocurriendo al planeta desde el principio hasta el final. Pero la historia también es una parodia del Arca de Noé que, en lugar de aterrizar en el Monte Ararat, llega a una de las islas del archipiélago de las Galápagos y en lugar de evolución, Kurt Vonnegut describe una involución.

Hay una anécdota sobre el velatorio de Isaac Asimov, en el que Vonnegut, al pronunciar un panegírico, comenzó con el comentario sobre Asimov, que era un ateo declarado: “Bueno, ahora está en el cielo”. Vonnegut, siempre el humanista humorístico, provocó risas entre los queridos presentes pero al hacerlo estaba demostrando su propia irreverencia juguetona hacia el teísmo y la propiedad.

Esta novela sobre la evolución -o la involución-, contiene múltiples referencias bíblicas, así como referencias biológicas a Darwin y a sus muchas teorías las cuales han tenido siempre un gran impacto en nuestra cultura. Por lo tanto, el pilar de esta obra es la premisa de que nuestros “cerebros grandes” fueron un experimento evolutivo que salió mal y un diseño más elegante con un cerebro más pequeño y sin manos funciona mucho mejor. La historia está narrada por el fantasma de Leon Trout, como os decía; el hijo de, nada más y nada menos, que Kilgore Trout, que nos habla desde el otro extremo del túnel oscuro que conduce al Más Allá. El mayor de los Trout advirtió a su difunto hijo que si no atravesaba el túnel y se unía a él en el Más Allá, no volvería a verlo en un millón de años. Y ahora el fantasma de Leon Trout narra esta brillante obra y observa el gran viaje evolutivo de la humanidad a lo largo de este extenso período de tiempo y ve cómo los grandes cerebros realmente arruinaron todas las cosas.

Hoy en día, la gente ya no tiene verdaderas ilusiones. Aprenden muy pronto qué clase de mundo es este en realidad, y es raro que un adulto no haya visto a un hermano o padre descuidado, devorado vivo por una orca o un tiburón (válgame la metáfora). Por otro lado, el consumismo, el conformismo y la hipocresía que nos rodean, los individuos simplemente pierden su verdadera identidad y aquí, en una novela que el año que viene cumplirá cuatro décadas, ya tenemos una anticipación a una involución que probablemente ya hace años que comenzó.

Brillante novela de Vonnegut una vez más.

Reseña: Dune. Edición Especial, de Frank Herbert

Raro es el lector que no sienta afinidad por siempre por Dune tras vivirla. Tras sentirla de verdad: introducirte en su mundo, dejarte llevar por su mitología, sus detalles, sus ideas… El Wow! brotará de tus labios en cuanto la devores. O quizás mienta. Quizás te surjan esas exclamaciones en el “durante”. ¿Por qué? Por que esta clásica novela puntera de Ciencia Ficción te lleva al futuro más lejano y para mal del demonio, te trae de vuelta a casa. Es una obra de arte. En mi caso, volver a ella tras los años, y en esta magnifica edición en tapa dura (de coleccionista, diría) que trae Nova CF, ha sido toda una experiencia. La considerada mayor epopeya del género de todos los tiempos (como dice la sinopsis editorial), con doce ilustraciones a color muy afines del artista Sam Weber para esta edición conmemorativa del cincuenta aniversario de Dune, de The Folio Society. En resumen, volver a sentir amor por la CF. Vista con ojos más adultos, me pareció tremendamente maravillosa y llena de cientos detalles. Por supuesto, devorada en cero como dos.

Dune mezcla aventura, misticismo y política. Nos lleva a un universo donde los planetas están controlados por Casas de familias nobles bajo el mandato imperial de un gobernante de una de las Casas. Cuenta principalmente la historia de Paul Atreides, hijo del duque Leto, heredero de la Casa Atreides. La madre de Paul es una especie de bruja con poderes únicos de persuasión que ha conseguido transmitir a Paul. La novela comienza con la familia Atreides preparándose para abandonar su amado planeta verde y tomar el control de otro; el llamado planeta Arrakis, que es básicamente un gran desierto. Pero también es el único lugar en la galaxia donde se extrae una valiosa sustancia llamada melange. Parece insignificante, pero este traslado real, desencadena una cadena de eventos que impulsarán a Paul a un mundo completamente nuevo de batallas por la famosa especia, monstruos de las arenas y como trasfondo los Fremen, raza de las arenas que vive entre las dunas. Todo esto más un joven Paul Atreides enfrentándose por un lado al emperador, y por otro, a sus antiguos enemigos de la Casa de los Harkonnen.

Dune es una obra épica la mires por donde la mires. Lo dicho, podría ser un resumen rápido, sin ir mucho al grano. Lo que podría comentar a un incauto amigo que no la haya leído aún mientras nos tomamos un té en un cafetería. Pero Dune abarca mucho más. De esos mundos que como consigas entrar (no cuesta mucho aún siendo un muggle total en CF), te cautivará. Repito: es mucho más. Dune establece un mundo intrincado y fascinante con la cantidad justa de tecnología. Me encantaron las descripciones de los «trajes de baño» que usan en el desierto para recuperar el agua del cuerpo (por lo que básicamente bebes tu propio sudor) y también las fábricas de cosecha (muy de insectos) para minería que vuelan dentro y fuera del desierto por los gigantescos “dispositivos alados» llamados carryalls, pilotados por una tripulación de mineros. Pero habla también de profecías y habilidades psíquicas (me encantó la madre de Paul, Jessica y sus misteriosos poderes), de disputas políticas (el personaje del barón Harkonnen es brillante, intrigante y despreciable), así como la acción, giros e intrigas que se van sucediendo. Disfruté y he vuelto a disfrutar especialmente de los pequeños extractos de la princesa Irulan al comienzo de cada capítulo, que por cierto, parecen no tener sentido la primera vez que los lees. Aunque a medida que avanza el libro, cobran lógica. Cuando finalmente “entiendes”, el disfrute alcanza cotas muy altas. Asientes y asientes. Y si lo tuyo es escribir, te maravillas y te mueres de envidia por que quieres escribir algún día algo así. Una novela inmortal.

Dune será siempre considerada el gran triunfo de la imaginación que convirtió a Frank Herbert en uno de los grandes visionarios de la literatura universal. Hoy este gran clásico vuelve a estar de actualidad por su aniversario y por que pronto inspirará película y serie de televisión dirigidas por Denis Villeneuve (guionista y director francés de moda en USA tras La Llegada y Blade Runner 2049). Una obra impertérrita, seductora, que ganó el primer Premio Nebula (1965), el Premio Hugo (1966) y cimentó una de las sagas más grandiosas de la Ciencia Ficción.

El no haberla leído aún, entre amantes de la literatura fantástica, es una verdadera blasfemia.

Reseña: Las Sirenas de Titán, de Kurt Vonnegut

Uno de los poderes o dones de Kurt Vonnegut es que sus novelas siguen siendo súper entretenidas, súper interesantes, a pesar de los años. Blackie Books debe saberlo, y cada no mucho, nos publican una joyita de este genial autor, esa misma editorial que tiene, sin duda, las portadas más atractivas que uno puede encontrar en una librería de este país a día de hoy. Aparte de contener ese olor a libro nuevo al que uno le gusta esnifar…

Las sirenas de Titán (1959) fue una de las novelas elegidas como mejor lectura vintage en el último certamen literario de literatura fantástica en el que participé. Yo no la leí entonces, pero sí que la devoré en mis primeros años de instituto en los que tanta CF clásica tragué. Es una novela, una historia, que viene a mi mente cada poco, eso también es cierto, y merecía una revisitación (Blackie Books quizás también sabe leer mi mente). Os digo de que va: Cuando Winston Niles Rumfoord vuela en su nave espacial hacia un infundíbulo cronosinclástico, se convierte en energía pura y solo se materializa cuando sus formas de onda interceptan la Tierra o algún otro planeta. Como resultado, solo regresa a su casa en Newport, Rhode Island, una vez cada cincuenta y nueve días, y solo durante una hora. Pero al menos, como consuelo, ahora sabe todo lo que ha sucedido y lo que sucederá…

El libro de Vonnegut no solo menciona la pregunta de cuál es el sentido de la vida, también responde a dicha cuestión. Por lo general, no prefiero narrar el argumento o sinopsis de una novela tal como se publicita, prefiero reescribirla o difundirla a lo largo de la reseña según me apetezca. Este libro no trata en absoluto de Winston Niles Rumfoord, o al menos no exclusivamente. Va mucho más allá. Y si me hubiesen dejado hacer entonces una redacción o un Comentario de Texto sobre este libro -cosa que propuse a la profesora de Literatura de la extinta B.U.P. allá por 1994-, quizás hubiese podido contar que nuestra verdadera estrella del espectáculo es el encantador pero deplorable Malachi Constant, heredero de una gran fortuna y llamado a ser testigo de una de las materializaciones de Winston. Porque Malachi recibe algunas predicciones sorprendentes sobre su propio futuro altamente improbable, tras lo cual rápidamente intenta desesperadamente dejar atrás su propio destino, con resultados divertidos y depravados. ¿Y qué ocurre? Por supuesto, no hay destino del que uno pueda escapar. Es mentira todo eso que dicen que tu te buscas tu propio destino. Es simple. Está escrito (y en negrita) que TÚ ibas a terminar donde has terminado. En Las sirenas de Titán, el destino es lo que es, y Malachi se ve arrastrado por las predicciones inquietantemente precisas de Rumfoord.

En el camino, Vonnegut se toma el tiempo para explorar temas que se repetirían a lo largo de su obra, como la inutilidad de la guerra y los peligros potenciales de la religión organizada, así como algunas de sus hipocresías innatas. El conocimiento de Rumfoord nos invita a plantearnos preguntas aún mayores, preguntas sobre el significado de la vida; no sólo la pregunta en sí, sino por qué es tan importante para nosotros saber la respuesta en primer lugar. Las cosas se vuelven sorprendentemente épicas para lo que en realidad es un libro bastante compacto y fácil de leer, que realiza un recorrido por la mitad del Sistema Solar y abarca décadas mientras aborda los importantes temas antes mencionados. Es una prueba de la habilidad de Vonnegut el hecho de que sea capaz de acumular tanto y provocar tales cuestionamientos filosóficos sin que las cosas se prolonguen o dejen de entretener. Incluso en las situaciones más sombrías, logrará provocar una sonrisa en el lector, ya sea una sonrisa de «ya veo lo que hiciste allí» o una sonrisa que acompaña a una carcajada total.

Aún tan entretenida como cuando se publicó hace más de cinco décadas, Las sirenas de Titán es puro placer lector. Nunca es duro ni sermonea, ofrece momentos de melancolía en igual medida, y es otro ejemplo más de lo maravilloso que fue este escritor.

Reseña: Ranx. Edición Integral Definitiva, de Tamburini, Pazienza y Tanino Liberatore

Aparte de ser un cómic que La Cúpula acaba de publicar en formato integral -un indispensable para todo comiquero-, esta reseña no es otra cosa que un hombre de muchas décadas redescubriendo una de sus lecturas juveniles. Porque Ranx formó parte de Cults, al igual que Nosferatu, Blade Runner, Mad Max y algunas otras; donde yo me lo encontré por primera vez. En esa publicación francesa que tan buenos momentos me dio en mis inicios lectores. Y ahora la oportunidad de tener todo-todito-todo recogido en un solo volumen, en tapa dura, con las curiosas aventuras de este monstruo, un cómic donde se mezcla ciencia ficción, aventuras, exotismo, erotismo… ¡Y terror! No es uno de los archiconocidos cómics de la historia pero es patrimonio del cómic europeo de culto. RanXerox es eterno.

La quintaesencia del movimiento cyberpunk. Donde la violencia se cuenta sin miramientos; sexo, drogas y violencia son la base de una trama futurista que se vende bastante bien en cuanto te pones con ella. Siete capítulos que recoge este integral, cada uno de ellos, en realidad, una aventura o publicación que Ranx tuvo en sus días. Donde destaco obviamente Ranx en Nueva York pero también ¡Ay, robot!, dos tramas que me encantaron a parte de no recordar haberlas leído nunca. Escenarios sencillos pero con atmósferas que hipnotizan.

RanXerox o Ranx es el protagonista de una serie de historietas de cómic underground creado en 1978 por el guionista Stefano Tamburini, con dibujos de Andrea Pazienza, primero, y, después, de Tanino Liberatore; tres grandes autores del país de la bota. El personaje principal es un androide violento, un anti-héroe y sí, es lo que estáis pensando. Su creador lo bautizó con el mismo nombre de la tan famosa marca de fotocopiadoras (Rank Xerox), y así aparece nombrado en la primera historieta (Los orígenes), dibujada por Andrea Pazienza. Pero los representantes de la marca le dirigieron una carta al autor y le instaron a dejar de usar dicho nombre sin autorización. Le amenazaron con ponerle una demanda. Lo que hizo Tamburini fue eliminar la letra «k» y unió las dos palabras y quedó RanXerox como nombre definitivo.

En nuestro país apareció por primera vez en la genial revista El Víbora en los 80. Como os decía, RanXerox es un cyborg amoral y poseedor de una fuerza, agilidad, y velocidad que lo transforman en una especie de súper hombre simiesco y salvaje. Lubna, su novia, es una preadolescente tan amoral como este semi-Terminator. Adicta a diversas drogas, solo cuenta con doce años pero tiene más calle que muchos de los adultos que la rodean. Vais a ver en el cómic que esta ausencia de inocencia en los personajes infantiles es algo común. Por suministrarle drogas, deshacerse de sus amantes y hacerla feliz, Ranx irá de Roma a Nueva York, ejecutará masacres colectivas e incluso actuará en Broadway. Ranx no le teme a nada, y menos al ridículo.

Un cómic rico en personajes amorales al borde de la desesperación.

A mí si que me parece Liberatore un gran pintor y dibujante. El surrealismo al servicio del lápiz o carboncillo. Y cuando hay colores, se usan con originalidad y arte. Por otro lado, quizás me dirías: ¿Por qué se necesita representar tanta violencia en un cómic? Les diría que, la realidad aquí es demasiado excesiva, pero no está demasiado alejada de lo que el ser humano es capaz de hacer. Algunos dicen que representa muy bien la política italiana. En ese tema, no sé… Pero tengo claro que es un cómic inmoral y me encanta por eso. El héroe “estúpido” y la adolescente pervertida forman un dúo muy interesante. Violencia, sangre, sexo, drogas, todo el lado oscuro de una vida que con el paso de los años, con el paso de las páginas, va quedando atrás. A quién no le va a gustaaaaaaaaaaaarrr…

Reseña: El Rastro del Rayo, de Rebecca Roanhorse

Rebecca Roanhorse es una de las nuevas escritoras del fantástico que viene pegando fuerte en estos últimos años. Todos sus últimos títulos publicados y ubicados en la lista de best-sellers del New York Times, así como ganadora de los más prestigiosos premios del género como el Nebula, el Hugo y el Locus e incluso galardonada en sus inicios con el Astounding (anteriormente llamado Premio Campbell) al mejor escritor novel.

Red Keys Books, la nueva editorial que en nuestro país lo está dando todo con cada nueva novedad, parece ser que están muy puestos en en CF. Deben saber lo que pasa al otro lado del charco y acaban de publicar aquí una de las joyitas, si no la mejor escrita de esta autora, hasta el momento. El Rastro del Rayo es toda una novelaca de las que yo suelo disfrutar muchísimo. Un debut sólido con personajes atractivos y un escenario fascinante que impacta. Y a las pruebas me remito. Contar que nuestra protagonista Maggie tiene la capacidad de matar. Pero esto está en su sangre. Literalmente, sus poderes provienen de su línea de sangre. Cuando de pronto un aterrador asesinato hace florecer los incipientes poderes de Maggie, Neizghání, una inmortal cazadora de monstruos, la rescata del horror. Entonces ella se convirtió en su alumna, casi en su discípula, y este acuerdo funciona durante unos años hasta que Maggie hace algo [¡No Spoilers!] tan terrible que incluso su maestra la rechaza y desaparece de su vida.

Meses después, Maggie apenas habla con nadie, apenas sale de su casa…, aparte de simples intercambios para poder ganar algo de pasta prestando servicios como asesina, no hace nada más. Hasta que llegan las aguas… y la mayor parte del mundo queda sumergido tras un apocalipsis climático. Por esto, la antigua reserva navaja de Dinétha renace y ahora, los dioses y los héroes de las leyendas recorren la tierra. Pero también los monstruos. Y Maggie Hoskie cree recordar que una vez fue una cazadora de monstruos de Dinétah, aunque sin terminar su entrenamiento. ¿Y eso importa? Acaba de nacer el Sexto Mundo.

Mola ver como en raras excursiones, Maggie se encuentra con un tipo de monstruo que nunca antes ha visto. Y como a partir de ahí lo investiga y busca información. Esto me encantó. No siempre un héroe debe luchar a la primera. Además, está claro que estamos ante una novela que la hace fuerte su protagonista. Me gustó mucho Maggie. El trauma del pasado lejano, combinado con el reciente y aplastante rechazo de Neizghání; cosa que la acercan a los monstruos y la alejan de la gente normal. Ver a Maggie luchar entre el sentimiento de su propia inutilidad y su deseo de ser amada (incluso por las personas equivocadas) es convincente.

Algunos ya me conocéis, soy fan acérrimo del género apocalíptico. De hecho, de eso trata mi única novela publicada. Pero es que me encanta una buena historia post-apocalíptica, y aunque pensaba en un primer momento que meterle monstruos y magia no le iba a sentar bien, la señorita Rebecca Roanhorse demostró que me equivocaba.

Por lo que he podido ver, no soy el único que disfrutó de esta novela, en realidad, creo que llegué un poco tarde a la fiesta. Pero aquí está. En español. Un título que hace diez años difícilmente llegaría a nuestro país pese a la cantidad de premios que tiene. El Rastro del Rayo (Trail of lightning) fue ganadora del Hugo/Nebula/World Fantasy/Locus. Y sí, eso es mucho decir. Liga, Copa, Champion y Mundial de Clubes de la Ciencia Ficción. Un debut sólido, un pelotazo de libro que nadie se debe perder. El estilo de la prosa de esta autora evita el símil en favor de la metáfora. Las cosas son lo que parecen, incluso cuando parecen demasiado monstruosas o míticas para creerlas. Escribe con oraciones cortas y directas que tienen una cadencia que parece coincidir con la taciturna y pragmática Maggie.

La lectura que uno pide en este siglo XXI.

Reseña: Weird Science Vol. 4, de Al Feldstein, Wally Wood y VVAA

También llegó a su culmen la genial colección en tapa dura de Weird Science. Junto a Tales from the crypt, otra colección súper celebrada por estos lares. Que vuelva a estar cada poco esta joya del cómic fantástico en nuestras librerías es para festejarlo. Y aunque aquí se dé el cierre, recuerden que es una antología que se puede degustar de forma independiente dada su variedad en las historias de los relatos. Un maravilloso arte y grandes historias donde se brinda por la Ciencia Ficción, y donde se ve como ya dije en su día, la enorme influencia que tuvieron estos trabajos en cine y televisión, historias que incluso influyeron en la gloriosa joya de la televisión como fue la serie The Twilight Zone, de 1959.

Un nuevo volumen de Weird Science…, un cierre que nos apena a la vez que nos alegra por la sensación maravillosa de tener por fin todo-todito-todo de esta genial revista que triunfó en los años 50 del pasado siglo. Al Feldstein, Wally Wood, George Evans, Frank Frazetta, Harvey Kurtzman, Joe Orlando y muchos más. Volumen contenedor de los números de la revista del #19 al #22, publicados originalmente entre mayo y diciembre de 1953 y marzo de 1954; además del #23 y #24 y de la Weird Science-Fantasy a la que derivaron entre marzo y julio de 1954. Las más chulas historias como El que espera, ¡Aborrecible!, Los reformadores, 50 chicas 50, La cosa fea, Mi mundo… donde el Terror está muy presente. Pero muchas más historias.

Una cosa que digo bastante es que si deseas ver dónde comenzó parte del gran arte y la escritura en los cómics fantásticos tienes que irte a los cómics de la EC. A estos. Dibujazos y grandes guiones, es que no se puede pedir más. Además, matizando, esta antología particularmente contiene seis historias con arte de Wally Wood, adaptaciones de cinco historias de Ray Bradbury, cuatro historias donde Frank Frazetta comparte créditos artísticos (con Al Williamson y otros) y una adaptación de una historia de Harlan Ellison. Puede ser de los cuatro volúmenes, el que más quilates tiene. Donde curiosamente, la adaptación de Harlan Ellison se publicó en 1954 y la historia no se publicó hasta 1958 (según isfdb); tengo que investigar el porqué.

Pero dicen que Weird Science fue lo mejor de toda la serie de EC Comics. No estoy de acuerdo. Pero obviamente es porque por aquí amamos más el género de Terror que otra cosa. Aunque sí que estamos de acuerdo en que la colección tuvo/tiene un potencial muy alto e incluso algunos relatos superan en calidad a los de Tales from the crypt. Pero no hemos venido a comparar a los dos mejores jugadores de fútbol de todos los tiempos. Juegan en puestos diferentes. Aquí lo que ha de quedar claro (repito) es que este volumen contiene lo mejor de lo mejor en cuanto a autores y que además contiene la adaptación de una de mis historias de CF como es The Rocket, de Ray Bradbury.

Invasiones extraterrestres, cohetes, experimentos nunca intentados… un volumen que tiene una vibra genial en historias como Un nuevo principio y Dos son compañía…, Historia de unos peces, todas de Al Williamson, quien redefine maravillosamente lo que debería ser la CF en el mundo del cómic. Relatos como El que espera y ¡Expulsión!, que han sido auténticos descubrimientos para mí. Y Wally Wood apostando por su reclamo, tocando el cielo con sus trazos, en Mi mundo. Una historia que muestra una galería de algunos de sus universos más fantásticos.

Y podría perderme en los interiores rarunos de una historia como Los años preciosos, o volver a releer una y otra vez historias como La cosa fea o Los niños, que son piedras preciosas flotando sobre oro líquido. Así que ya no babeo más vuestra lectura. Un gran volumen muy consistente, uno de los mejores, si amas la CF, lectura obligada.

Reseña: Redshirts, de John Scalzi

Redshirts es, además de sus premios, una novela de CF tremendamente divertida. Lo que Scalzi hace, de alguna manera, es explorar lo absurdo de lo típico mencionado sobre los redshirts (camisas rojas) y sin burlarse de los propios protagonistas, saca adelante una historia brillantemente divertida, insisto, con una cantidad inesperada de peso emocional, que deja un tremendo buen sabor de boca. Y deja con ganas de más como suele pasar con casi cualquier libro de Scalzi. Os lo confieso: mi autor favorito de Ciencia Ficción actualmente, al que me enganché con su obra de arte como es La Vieja Guardia.

Redshirts (originalmente titulada Redshirts: A Novel with Three Codas) es una aventura espacial que aprovecha esos toques que Star Trek y series de televisión similares aportaban a la CF. Fue un libro que la crítica en USA adoró desde el primer momento y se demuestra en como se hizo con los premios más valiosos del género como son el Premio Hugo (2013) a la Mejor Novela y el Premio Locus a la Mejor Novela de Ciencia Ficción. Scalzi combina una parodia directa, y además aporta esa característica narración de ritmo rápido y personajes ingeniosos que tenían las novelas de a duro (algunos me entenderán). Historias palomiteras. Y diría que, en ocasiones, llega a tener un nivel tan alto de gustosidad que la podría poner entre uno de los libros más disfrutables que se pueden leer actualmente dentro del género.

Ambientada en el siglo XXV y centrada en la tripulación del buque insignia de Universal Union, el Intrepid, esta novela es todo Scalzi en tono y estilo, desde el principio. En el primer prólogo, varios oficiales superiores de la nave lamentan el número inusualmente alto de bajas de miembros de la tripulación de bajo rango caídos durante misiones recientes. Y concluyen que necesitarán más tripulantes para reemplazarlos. Y adquieren cinco nuevos alféreces, incluido Andrew Dahl, un experto en religiones alienígenas y xenobiología.

Dahl rápidamente se da cuenta de que la tripulación es extremadamente fóbica de estar cerca de los oficiales superiores y de salir en misiones debido a su alta tasa de mortalidad. Así que en el transcurso de varias misiones, varios miembros de la tripulación sugieren que las muertes se deben a la incompetencia, la superstición o las fuerzas cósmicas, lo que requiere «sacrificios» de algunos miembros de la tripulación para que otros sobrevivan…

Hay docenas de esos momentos que capturan la inspiración y los chistes internos que ayudan a construir el mundo de Redshirts (en una entrevista, Scalzi habló sobre su enfoque del proyecto) y, si bien son divertidos, también son sorprendentemente efectivos. en atraerte a una historia que es más que una simple parodia.

Si estás leyendo esta reseña, tienes que leer este libro sí o sí.

Reseña: El Último Americano, de John Ames Mitchell

Para estar instruido en la buena Ciencia Ficción clásica, las imágenes de una Estatua de la Libertad en ruinas con un telón de fondo de la decadente Nueva York, no sólo te deberían recordar a un famoso final de una peli de monos inteligentes. Estaría bien que te llevaran también a pensar en una novelita súper curiosa de un tal John Ames Mitchell que escribía algo tan diferente como extraño en El Último Americano. Un título que Ediciones Obelisco acaba de rescatar y traer a novedades en su ya considerable colección de grandes clásicos de la CF.

Para vuestra información también vais a encontrar las visiones de una Washington D.C. pos-apocalíptica. No sólo la ciudad que nunca duerme se lleva flores aquí. Como he señalado en reseñas anteriores, la fascinación por la ruinas, por un mundo devastado y echado a perder, no es algo moderno que hayan puesto de moda las pelis de zombies o Last of Us. Fue una inquietud literaria que surgió en ciertos autores a finales del siglo XVIII. Pero hay que tener en cuenta que USA era un remanso en aquellos años de Revolución Industrial importada de Europa. El Nuevo Mundo (o la presencia occidental allí) era demasiado nueva como para que triunfaran historias que querían arruinarlo todo con visiones futuristas. Sin embargo, la primera obra de CF que se conoce con las principales ciudades estadounidenses en ruinas, es la breve sátira de 1889, El Último Americano, escrita por el editor, arquitecto, artista y novelista estadounidense, pero también cofundador, editor y editor de la revista Life original, el señor John Ames Mitchell (1845-1918).

El Último Americano se presenta como un extracto del diario de un almirante naval persa, quien con su tripulación llega al puerto de Nueva York, mil años después de la desaparición de Estados Unidos en 1990. Los persas, que tienen nombres burlones, comentan las locuras de la civilización perdida, mientras que ellos mismos son retratados como primitivos supersticiosos que hacen que los antiguos «mehrikans» se vean bien en comparación. En un mundo que ha sido devastado y América del Norte prácticamente aniquilada por los cambios climáticos.

La edición viene presentada en tapa dura e ilustrada con grabados de media página insertados en el texto y algunos grabados a página completa. Es una delicia que evoca a a aquellos grandes libros de aventuras que algunos leíamos de pequeño.

El Último Americano es por un lado, una mirada satírica a los usos y costumbres norteamericanos a partir de los restos que van encontrando los protagonistas persas. También parece ser una parodia de los descubrimientos arqueológicos que se estaban dando en aquellos años de finales del XVIII. Todos los persas y las ciudades tienen nombres ridículos que leídos en voz alta suenan a lo que en realidad son. Una novela que se encuentra en la literatura antiutópica de desastres, muy al estilo de Caesar’s Column, de Ignatius Donnelly o The End of New York, de Park Benjamin Jr. Aunque las Cartas Persas, de Montesquieu, pudieron haber haber proporcionado cierto grado de inspiración.

Es una sátira, una crítica de las gordas al norteamericano de pro. Los historiadores están asombrados de que una nación de más de setenta millones desaparezca de la tierra como una niebla y deje tan poco atrás. No había nada que dejar. Los mehrikanos no poseían literatura, arte o música propiamente dichos. Todo era prestado. Una “raza” aguda, inquieta, aguda, codiciosa, entregada en cuerpo y alma a la acumulación de riquezas, muy “romana”. Te robo, copio tu idea y me la quedo. Pocas historias de CF vais a encontrar más sinceras.

Reseña: Cita con Rama (Edición Ilustrada), de Arthur C. Clarke

Cita con Rama es una de las obras más premiadas de uno de los mejores escritores de Ciencia Ficción de todos los tiempos. Galardonada con los premios Hugo, Nebula, Locus, John W. Campbell y BSFA; empezando por ahí, la lectura ya está ultra-recomendada, ¿no? Después bueno, unas buenas ilustraciones de la historia como las que hace para la ocasión el artista Gabriel Björk Stiernström y el dato de que este gran clásico será llevado al cine en breve nada más y nada menos que por el gran Denis Villeneuve (Prisioneros, La Llegada, Blade Runner 2049, Dune), creo que con esto ya está todo el pescado vendido.

Qué más decir de un gran clásico e indispensable obra de la CF dicho por todos. La reseña podría acabar aquí. Recomendable sí o sí, ya sabéis, sólo los superlativos servirán para hablar de una historia de exploración deslumbrantemente pulida y maravillosamente original del maestro Arthur C. Clarke donde en 2077, una gigantesca nave espacial alienígena pasa brevemente a través del Sistema Solar en su camino hacia un destino inimaginable. Y bautizada como Rama por sus descubridores humanos, ese “mundo pequeño” que parece muerto al principio, vuelve a la vida de manera sorprendente y peligrosa cuando una tripulación de terrícolas investiga sus misterios. Pero cuando Rama deja el Sistema Solar tan precipitadamente como llegó, quedan más preguntas que respuestas.

El lector, al igual que los exploradores que visitan Rama, verá maravillas inimaginables para la mera filosofía humana. Se trata de un cilindro perfecto de unos cincuenta kilómetros de largo, que gira a una velocidad fuera de lo normal y viaja por el espacio en línea recta. Ante esas evidencias, los investigadores se preguntan si están ante el primer visitante procedente de las estrellas.

Cita con Rama (Rendezvous With Rama) fue publicada por primera vez en 1972. Tuvo una repercusión enorme tras otra obra famosa de Clarke como fue 2001: Una Odisea en el Espacio. Un libro asombroso, uno de los mejores libros de CF que puedes leer si no el mejor. Sigues a la tripulación de la nave espacial Endeavour mientras aterrizan en la nave alienígena y se abren camino hacia el interior para encontrarse cara a cara con un terreno increíble e inexplicable de ciudades y pasarelas y un mar circular gigante congelado, que forma una banda alrededor de la mitad de la nave… Hay toda una gama de peligros a medida que la nave se acerca al Sol y es una carrera contra el tiempo para que la pequeña tripulación encuentre sentido a algo que la humanidad nunca antes había experimentado. Pero, ¿quién la envía? ¿Atacará a la Tierra? ¿De dónde vino?

Uno de los mejores libros de CF. Muy de acuerdo con aquel que dijo que estamos ante una novela de CF perfecta.