Una de las aventuras que más me ha impactado de Corto. Luego, me entero que es de las consideradas de culto. Este viaje a Asia alterna entre acción y encuentros con numerosos y carismáticos personajes, en particular, con Rasputín (mi favorito), obra donde se percibe claramente que Hugo Pratt estaba entonces en la cima de su carrera. Su dibujo es magnífico y algunos planos son simplemente joyas de la ilustración.
Norma Editorial recién edita este titulo del marino/detective clásico. Corto Maltés en Siberia rastrea el viaje de Corto, entre 1919 y 1920, que le llevó desde Hong Kong a la tundra siberiana, pasando por Manchuria y Mongolia, con la idea de apoderarse del tesoro imperial ruso que llevaba oculto un famoso tren blindado. Una aventura llena de giros o vueltas de tuerca, rica en sorpresas al lector y con personajes importantes en primer plano. Un álbum trepidante donde la acción es omnipresente. Muchas escenas épicas (los ataques del tren), héroes extraordinarios (Baron von Ungern-Sternberg, Changaï Li, Duchess Marina Séminova…), paisajes soberbios, humor (gracias a Rasputín): en resumen, una de las aventuras indispensables, de las mejores (para mí la mejor) de la colección de Corto Maltés.
Pese a mis halagos, mi tito americano (este que os cuento que me instruyó/instruye en cómic europeo), me dijo una vez: «¡No es el mejor Corto para mí! Demasiados personajes y nombres diferentes que hace que sea bastante difícil de entender la historia». No estoy nada de acuerdo. Los diseños son chulísimos y respecto al enorme elenco… ¿Os parece lioso Juego de Tronos pese a la cantidad de personajes que tiene? El que haya leído los libros, dirá que para nada. En las obras bien escritas y descritas, esto se lleva bien. Cuando algo es interesante para ti provoca que te inmiscuyas y te guste cada detalle. Y los toques de humor entre Corto y Rasputín en este álbum son delirantes. Y en eso mi tito me tuvo que dar la razón.
A través de una región devastada por la guerra y la violencia (noreste de Asia), Corto Maltés vive una aventura donde se entrelazan disparos, cuchilladas y más disparos. Donde hacen su aparición personajes atípicos, llenos algunos de crueldad y otros de romanticismo. El más extraño, el del barón Von Ungern-Stenberg, el más extraño de todos por ser un personaje histórico real. Que insisto, muestra la crueldad del hombre y el caos de toda una región, pero sobre todo la codicia bien descrita en el que es, en mi opinión, el mejor álbum de la serie leído hasta ahora.
Tras Las Célticas (https://www.cronicasliterarias.es/?p=1844), llega el correspondiente sexto titulo de esta gran colección que -y esto es algo que digo mucho por que no todo el mundo lo sabe-, son álbumes totalmente independientes. Un cómic que nadie debería perderse ahora que Norma Editorial está recuperando en orden cronológico todas las aventuras del gran clásico de Hugo Pratt. Todo un hito del noveno arte disponible ahora en dos espectaculares ediciones a color y en blanco y negro. Tú decides.
Corto Maltés en Siberia es una obra maestra y una pieza clave en la biografía del marinero de Malta. Un álbum grandioso, una aventura magníficamente contada donde se nos traslada de forma magistral a la frontera entre China y Rusia, una Rusia sacudida por las convulsiones del proceso revolucionario que está acabando con el imperio de los zares.
Cuentan que la importancia de la representación de los trenes en esta historia lleva al autor a buscar la ayuda de su amigo, el diseñador Guido Fuga, que también era responsable del diseño de aviones y armas pesadas. Esta primera colaboración, será seguida por muchas otras para los siguientes álbumes… Y es que Corto Maltés en Siberia se centra de algún modo en la abdicación (15 de marzo de 1917) del zar Nicolás II, cuando Lenin y Trotsky derrocaron al actual gobierno con la famosa Revolución que estudiamos en los libros de Historia. Un periodo movido que removió los cimientos de toda Europa y donde tuvieron lugar (seguramente) hechos como los que se cuentan en este volumen.