Siempre pienso que Solomon Kane pudiera ser el personaje de la literatura fantástica más denostado por el público en general de la historia. Y uno a la vez de los que goza con más potencial para ser desarrollado en cine o series de TV a día de hoy… y no se hace… bien. Tampoco se ha insistido. De hecho, siempre vi a Kane como el personaje con más puntos profundos chulos de los personajes icónicos que crearía Robert E. Howard en su corta existencia; escritorazo que dio vio a Conan, por supuesto, pero a otros grandes como Kull de Atlantis o Pictos. A lo que voy es, que bien llevado, Solomon Kane da mucho juego. Hablamos de un personaje con muchas aristas que se mueve en un siglo lleno de sombras. Ambientación de las poderosa, del que si podéis haceros/leer con la antología de relatos que publicó Valdemar, vais a gozar de lo lindo. No obstante, por culpa de varios editores de revistas pulp e incluso por la enorme apuesta que hizo Marvel por el personaje de Conan entonces, Solomon Kane pasó a ser un personaje aún más secundario y conocido por tan solo unos pocos que indagábamos y queríamos más.
El empujón que Marvel dio al personaje literario de Conan en los 70s fue maravilloso para que se conociera mundialmente. Sin embargo, Roy Thomas y otros autores que son fans de la literatura fantástica clásica como tú y como yo, también vieron el potencial y dieron una oportunidad a Solomon Kane para con el noveno arte. Y muchos lectores de entonces lo disfrutaron. Aunque a este semi-detective de lo maldito le persigue el Mal, tiene otro, que es el de contar con muy pocas historias en proporción al cimmerio más famoso de todos los tiempos. Pero… ¿por qué cuento todo esto? Para los nuevos, esos mismos que seguramente se habrán asustado al ver que tanto viejuno ha flipado y mensajeado en redes sociales, alucinando muy mucho tras la reciente y magnífica edición en formato ómnibus que acaba de publicar Panini Cómics sobre el personaje; deciros, que muchos pensábamos que jamás podríamos tener todo esto reunido en un solo volumen y remasterizado. Muchos pensábamos que los sueños así no se cumplen. Se podría decir que ahora tenemos a Solomon Kane y sus aventuras remasterizadas, en un formato glorioso, nuevamente disponible. Sensación equiparable a volver a ver al Titanic a flote…
Marvel Omnibus. Solomon Kane: La Etapa Marvel Original contiene lo más grande, mejor y diría que todo lo publicado sobre el personaje. Concretamente: los números de Marvel Premiere #33-#34, Solomon Kane 1-6, material de Conan Saga 50, Dracula Lives! 3, Kull and The Barbarians 2-3, Marvel Preview 19, Monsters Unleashed! 1 y The Savage Sword of Conan 13-14, 18-20, 22, 25, 26, 33-34, 37, 39, 41, 53-54, 62, 83, 162, 169, 171, 219 y 220. Ahí es nada. Donde las primeras páginas del tochal marcan ya el tono muy rápidamente. Encontraréis violencia en cada uno de los números, del tipo que solo se puede tener cuando se trata de espadas y pistolas, sí, mas, la naturaleza gráfica que se muestra debería ser suficiente para que decidas si este tipo de historias y personaje es para ti.
Un tomaco que empieza con la primera aparición del personaje en formato cómic en el Kull and The Barbarians #3 USA, donde Solomon Kane protagoniza La Senda de Solomon Kane, una historia que adapta el relato de Hills of the Dead, de Robert E. Howard, uno de mis favoritos del personaje. Eso me hace estar aúa más orgulloso de tener esta edición entre mis manos. Por que ya es un no parar: cuentos de hombres lobos, vampiros, no-muertos, casos de desaparecidos, brujas que no merecen vivir y otros monstruos que no esperas. En esa linea, es a lo que se enfrenta el malevaje de Solomon Kane. Toda una serie de seres que adoran el Mal y que se enfrentan a Kane sin remilgos. O le hablan. Historias que maravillaran a los desconocedores de tales tramas, las mismas que son dignas de rememorar para los amantes del personaje desde el principio de los tiempos. Historias como La diestra de la muerte, Espadas de la Hermandad o el genial arco Luna de Calaveras, que se publicó en las Savage Sword of Conan #34, #37 y #39 de los bonitos años 1978 y 1979. Pero con bastantes más adaptaciones de los relatos de Howard y nuevos capítulos de autores como Roy Thomas y Ralph Macchio, dos maestros ya consagrados del noveno arte.
Una maravilla de edición que se recomienda sola. Historias y artículos que componen la emocionante saga del severo y mortal puritano Solomon Kane. Una epopeya de obras dignas de expansión, extrañas aventuras que no debieran pasar inadvertidas para el degustador de la mejor literatura fantástica o aficionado al rol, pero también una idea, un hito que no se debiera comercializar demasiado porque parece un personaje hecho para el disfrute de unos pocos. Guiones de historias clásicas del cómic de Terror, que inspiran y evaden a personas como yo. Desde la Inglaterra del siglo XVI hasta las remotas selvas africanas donde ningún hombre blanco ha puesto un pie. Aquí hay historias que provocan escalofríos, fantasmas vengativos, demonios sedientos de sangre, hechizos de goecia ejercidos por hombres y mujeres sin alma, todos opuestos a una especie de vengador armado de fe y pistolas y con el corazón salvaje de un guerrero. Casi desde la primera página, cautiva. Un personaje interesante con una estricta visión del mundo. Incluso los personajes secundarios de cada historia están bien desarrollados.
Una lectura que pese a su tamaño (tristemente) vais a leer en nada. Entretenida, pulposa, pulpera a más no poder. Guiones bien trasladados, guiones maravillosamente ilustrados, de un protagonista interesante que en formato cómic cambia (más acción); cosa que le vino de perlas. Un cambio leve, el justo para que guste y no te cargues la idea primaria que proponía Robert E. Howard. Así que no busquéis más. Ya se ha publicado el Integral del Año. El deseo de muchos hecho realidad. Los sueños se cumplen. La posibilidad de comprarlo, ahora, existe. Qué feliz estoy…
¡Por la gloria de Cotón!