Reseña: Marvel Saga. Aniquilación 1. Prólogo, de Keith Giffen, Mitch Breitweiser, Scott Kollins y Ariel Olivetti

Frase típica de un colega con estos temas: «Tío, se viene mandanga de la buena». Eso, en idioma entendible comiquero siginifica que en los próximos-días-semanas-meses (rara vez), se van a publicar títulos de cómics que hay que pillar sí o sí. Bien, no hace mucho me habló de la mandanga e hizo referencia en dicha ocasión a este genial formato que Panini Cómics está publicando con algunos títulos, tomitos en tapa dura, llevaderos y económicamente ideales llamados Marvel Saga. Formato en el que se publica la maravilla que es La Tumba de Drácula, también. Pues en este diseño editorial se viene toda la poderosa trama de Aniquilación. El que es para mí, el mejor y más chulo evento cósmico de Marvel de los últimos veinte años como dije en https://www.cronicasliterarias.es/?p=3342, cuando reseñé el 100% Marvel HC Aniquilación: Plaga. Bien. Antes de comenzar, quiero que disculpéis mi exceso de entusiasmo con este macro-evento pero cuando algo mola, mola. Y si por ende, fuiste niño de los 80s, lector de cómics, y por tanto, te tocaron, la fibra cuando joven con las gloriosas Secret Wars…, pues como que te quedas tocado con los eventos cósmicos con superhéroes de por vida.

No obstante, el “problema” es que Aniquilación, cuando la terminéis, cuando sepáis todo lo que sucede y los ramales argumentales que se dan a partir de ella; os va a flipar. Estoy seguro. Recomiendo a bastante gente lecturas y no solo en Desde New York – Crónicas Literarias. He recomendado también en podcasts, en algún que otro programa de radio y por supuesto, muchísimo-muchísimo en el boca a boca. Casi dia a dia. Y os puedo decir que el feedback tras recomendar Aniquilación como evento gigante leído, como enorme aventura en grosor, es toda una delicia.

¿Para empezar sí o sí con la trama? Este. El comienzo de una formidable epopeya que no me canso de recomendar, de hecho, Panini Cómics lo indica claramente en el subtitulo de la colección al que lo afilia. Aniquilación Saga 1: Prólogo. Un tomito que abre con mapa indicativo de las sagas que dentro del macro-evento se hallan. También una Introducción (Camino a Aniquilación), de Sergio Aguirre que ayudará bastante a los más desconocedores de la obra. Además, indicaros que en cómic USA, Aniquilación Saga 1: Prólogo, realmente, solo fue una grapa, un one-shot (Annihilation: Prologue One-Shot). Aquí Panini Cómics hace algo formidable metiéndonos en el volumen, aparte del one-shot, la miniserie de cuatro numeritos de Drax the Destroyer, que por linea temporal iría un poco antes y enlaza con el principio del evento. Tremendo trabajazo.

Keith Giffen y Mitch Breitweiser publicaron entre 2005 y 2006 la miniserie Drax El Destructor. Drax, un bicharraco con músculos doquiera que vayan tus ojos, el portentoso de piel verdosa y gris que conoceréis muchos de Los Guardianes de la Galaxia. Y aquí lo que se trata es: ¿Qué hace esta mole de pensamientos oscuros cuando no está aventurándose por el espacio con Los Guardianes? Una aventura en solitario donde se deja ver que su búsqueda de venganza sedienta de sangre toma el asiento del piloto. Recordad, el odio a Thanos que gobierna a este ser, que le sobrepasa de vez en cuando, haciendo que se lance a por todas para encontrar y matar al Titán Loco de una vez por todas. Por lo que Drax está listo para enfrentarse al Universo si hace falta porque regresa a él, el daño que le hizo a su familia. Un deseo inquebrantable de derramamiento de sangre que es posible que las profundidades del espacio no sean lo suficientemente grandes como para contener tanta determinación, venganza y acción. Aventura palomitera que de algún modo te mete en situación para lo que se viene después.

¿Y qué deciros de Aniquilación: Prólogo? Pues que aquí es donde empiezana darme vueltas los ojos. Donde Marvel dio un paso al frente a principios de los dos miles, donde Giffen se entregó en una historia en cuerpo y alma como escritor y creador, con el arte de Scott Kollins y Ariel Olivetti que le dan a la historia un alcance épico. En este one-shot incluso hay algunos momentos divertidos, pero solo sirven para atraer al lector a una falsa sensación de seguridad antes de golpearlos con algo trágico.

Tíos, se viene mandanga de la buena.