Reseña: Strange Tales. La Antorcha Humana contra La Cosa

Fue dentro de la maravillosa revista Strange Tales que apareció por primera vez mi amado personaje de La Cosa haciendo tándem con la gloriosa Antorcha Humana. Concretamente fueron treinta y tres números (desde el #101 al #134 y el Annual #2) donde pudimos vivir sus aventuras juntos tras el debut de estos superhéroes en Los 4 Fantásticos. Exactamente, los mismos números que se comprenden en este maravilloso Marvel Limited Edition que Panini Cómics junto a SD sacan al mercado editorial español en estos momentos. Y ahora va cuando os cuento cómo se inicia todo. Y es que mientras está en su casa en Glenville, Johnny Storm se topa con un complot para detener la construcción de un parque de atracciones local, perpetrado por alguien que se hace llamar el Destructor. Así que tras rescatar a unos trabajadores del sabotaje de los Destructores, la Antorcha descubre que hay algo más en la trama… Y acto seguido, mientras la Antorcha Humana acapara titulares, el Mago lo culpa de su reciente pérdida de popularidad. Un Mago celoso engaña y atrapa a la Antorcha, y sin embargo, la forma en que la Antorcha resuelve el problema es realmente ingeniosa. Me gustó. Pero espera… ¿no sabéis quién es el Mago? Es un brillante inventor, científico y hombre renacentista en todos los sentidos, y está celoso de la atención que se está centrando en la Antorcha Humana por las hazañas que va realizando desde su nueva aparición en la Tierra…

Los lectores de Marvel ya habréis visto historias así. Sobre todo, en Los 4 Fantásticos, donde alienígenas, a cada momento, intentan desacreditar o dañar de alguna manera la reputación de todo el equipo, de La Primera Familia, como se les empieza a conocer. Los Skrulls hacen lo mismo una y otra vez a lo largo de la historia. Lo sabéis de sobra. Sé que los años 60 estuvieron plagados de mucha agitación social. La apariencia del Mago, el Destructor y otra muchos que encontraréis en este tochal, no es otra cosa que referencias certeras a lo que se sentía, de lo que muchos sentíamos viviendo en USA en aquella década. En lugar de monstruos, encontramos un montón de referencias a «comunistas» y a la Guerra Fría. Y dentro de todo eso mola ver primeras aventuras en solitario de personajes icónicos, y pese a todo, si lográis valorar lo que tenemos entre manos, creo que son aventuras que se leen bastante bien. Johnny descubre más sobre sus poderes e intenta mantener una identidad secreta. Veremos más de esto cuando Peter Parker también tenga su propia cabecera. No es otra que Stan Lee encaminándose hacia los guiones del  súper adolescente.

Encima tenemos a Kirby que lo hace destacar todo aún más. Y eso que aquí todavía estaba iniciándose en la tremenda evolución que tendría unos años después. Las secuencias de acción son bastante estándar, poco dinámicas, pero son la fuente de lo que muchos maestros creadores idealizarían en años venideros. Y sigue siendo arte de Kirby, ¿no? Con sinceridad, recordad que estamos hablando de cómics viejunos. Decir que obviamente esto no es para todo el mundo. Son historias clásicas solo para amantes del cómic de superhéroes de toda la vida y víctimas de la nostalgia setentera y ochentera que nos gobierna a muchos. Las décadas en los que muchos de los que andamos por aquí los descubrimos en nuestra infancia.

El deseo de los lectores de más aventuras de sus personajes favoritos llevó a Stan Lee y Jack Kirby a desarrollar un serial protagonizado por La Antorcha Humana, con frecuentes apariciones de La Cosa, en las páginas de la Strange Tales. La Edad de Plata en todo su esplendor. El Mago, El Hombre de Arena, el Hombre Planta o el único e inimitable Pete Poste de Pasta, además de El Hombre de Hielo, Spiderman, Mister Fantástico y la Chica Invisible.

Joyita renovada.