Reseña: Lucky Luke Integral, de Morris y René Goscinny

Por si algún “chico moderno” no conociera o conociera poco quién es Lucky Luke, le diría que este nombre nació como una serie de cómics franco-belga versado en historietas del Lejano Oeste, un cómic, una serie, en parte muy paródica protagonizada siempre por el mismo vaquero o cowboy que da nombre al título. Y creada por el maestro ilustrador belga Morris para el Almanach 47 de la revista Spirou de 1946. Aunque a partir de la novena historia contó con varios guionistas, entre los cuales el más famoso fue el gran René Goscinny.

Se puede decir que junto a Blake y Mortimer (otra maravilla que también está publicando ahora Norma Editorial), Marsupilami, Titeuf, Tintín, Johan y Pirluit, Los Pitufos y Astérix; estamos ante uno de cómics más populares de la BD o del denominado cómic europeo. Porque Lucky Luke, el vaquero solitario, es conocido en toda Norteamérica por sus habilidades con el revólver. Defensor de la viuda y del huérfano, pone sus armas al servicio de la justicia, en historietas salpicadas de humor en las que se cruza con celebridades como Billy el Niño, Calamity Jane y Sarah Bernhardt, entre otros. Pero sus enemigos más famosos son los Dalton… Hermanos que son una copia pálida y bastante patética de malhechores ladrones que para muchos son ilustres modelos a seguir por su maldad. Y aunque existe falta de talento, la determinación de Joe y sus hermanos causará muchos problemas a Lucky Luke, a ese que dicen que dispara más rápido que su sombra.

Siempre he disfrutado las aventuras de Lucky Luke. Historias que tienen la habilidad de ser siempre-siempre entretenidas como buen cómic europeo clásico que es. Aunque siempre fui más de personajes secundarios como Rantanplan y los Dalton. Todo en un cómic, un estilo de Morris que se volvió rápidamente icónico. Dibujos que parecen sencillos pero que tienen detalles y rebosan una originalidad enorme, efectivos y que contribuyen al humor de la serie con notabilidad. Porque se percibe pronto que Lucky Luke en su sencillez, encarna la justicia y la defensa de los débiles. Su lado caballeroso puede parecer demasiado perfecto, pero eso es lo que lo hace encantador. Por eso, a día de hoy, Lucky Luke sigue siendo una apuesta segura dentro del cómic franco-belga, para leer por placer y por nostalgia. Y que llegara en formato integral a nuestro país, sólo era cuestión de tiempo. Al otro lado de los Pirineos se espera con ansia la llegada del segundo integral y aquí, obviamente, ya estamos en la misma situación. Porque esto es una verdadera joya a tener en cualquier cómicteca que se precie.

Una serie con un humor excelente. De los pocos cómics clásicos que a día de hoy me siguen haciendo reír. Estoy de acuerdo en que es una genial edición integral de una de las cumbres del noveno arte. Una edición que recupera la obra maestra de Morris y Goscinny en tomos de cuidada factura acompañados por un extenso dossier con textos e imágenes inéditos. Y para empezar, cinco aventuras que figuran entre lo mejor de la historieta mundial de todos los tiempos.

Y no me iré sin decir que Lucky Luke cuenta con el que es para mí el mejor personaje caballo de todos los tiempos. Un compañero icónico llamado Jolly Jumper, un caballo inteligente y leal que siempre está dispuesto a ayudar a Lucky Luke en sus misiones y que tiene una personalidad única siendo capaz de comunicarse con su amo siempre de una manera especial que provoca más de una sonrisa.

Brillante.