Quizás debió ser así desde un principio. Pero bueno, los estamos teniendo ahora y eso es casi lo que cuenta. Todos deberían tener un Año Uno y esto debe ser contado. Los inicios. ¿Hay algo más interesante que saber/conocer los inicios, lo que ocurrió en lo considerado como primer año de un superhéroe o villano? Pocos cosas son más interesantes que eso. Saber cómo empezó todo, de un personaje que te mola. Y ahora le ha tocado el turno al Joker. Y para esto debía haber un grande autor detrás. Y resulta que lo hay. El gran Brian Azzarello está tras el guion de una historia espeluznante que aporta luz sobre los orígenes del Príncipe Payaso del Crimen que nos va a llevar a épocas diferentes, incluido un futuro bastante aciago, como se indica en la sinopsis de este volumen en tapa dura que recién publica ECC Ediciones. Pero es que tras el guion también anda el tan de moda Chip Zdarsky que tanto disfruté hace no mucho en Failsafe (https://www.cronicasliterarias.es/?p=17527).
El primer capítulo de la historia de Joker: Año Uno no podía tener mejor comienzo. Técnicamente, estaba bien contado pero desafortunadamente se nota que Chip Zdarsky está trabajando en contra del hecho de que todo esto es territorio viejo y debe ser revisado. Y para una historia/propuesta así, era obvio que Zdarsky necesitara encontrar un gancho casi único porque lo cierto es que en DC, las últimas tramas que se han publicado con el sonrisas como protagonista, han sido algo mediocres. Así que la pregunta era: ¿Podía Zdarsky encontrar una manera de hacer que Joker: Año Uno resultara memorable? Se descubre ya en el Batman #142, que es el primer número de los tres que engloba este mini arco, que ilustran Giuseppe Camuncoli y Andrea Sorrentino.
La aterradora historia de Joker: Año Uno continúa cuando una misteriosa figura del pasado de Batman entra en la órbita de Joker. Un ser que cambia al Príncipe Payaso del Crimen para siempre. Pero, ¿qué secretos tiene la pandilla de Red Hood reformada para el futuro de Batman? La historia comienza y parece ser otra historia de relleno pero desde un punto de vista técnico, Chip Zdarsky hace su magia para condensar todas las historias icónicas del Joker y cuenta una versión moderna del “origen definitivo” del Joker. Lo más interesante que hace Zdarsky es responder la pregunta al concepto de los Tres Jokers introducido durante Los Nuevos 52 y Renacimiento. Simplifica la respuesta haciendo que las tres versiones definitivas del Joker sean todas la misma persona y esa es la decisión correcta. Trabajar con el Joker utilizando cómo Bruce creó su personalidad de Batman de Zur-En-Arrh para crear a los Tres Jokers conecta las cosas con la narrativa más amplia de Zdarsky. Y el hecho de que el Joker lleve las cosas más allá es lo que le hace ser un villano tan aterrador.
Algo que destaca bastante cuando vemos al Joker reflejado en otra época, es ver como el orejas picudas se encuentra con un Señor Demonio. Algo que Daniel Captio incluso teme. A veces, un misterio es tan fuerte que ni siquiera te das cuenta de que es un misterio. Esa es la belleza de este cómic. Captio entrena al Joker, tal como entrenó a Batman. Le enseña al Príncipe Payaso cómo soportar el dolor, cómo trabajar con sus emociones y cómo convertir su cuerpo en un arma. Captio también le enseña al Joker cómo crear múltiples personalidades, que es donde entran en juego los tres Jokers. Idea brillante donde las haya.