Un mundo medieval sometido al caos en una extraña atmósfera del fin del mundo es la primera impresión que te llevas cuando conoces por primera vez el cómic de Shayne publicado en nuestro país por Yermo Ediciones. A primera vista mola, a poco que te guste el género Fantasy Noir. Hay varios elementos atractivos, donde tenemos un universo que duda entre fantasía medieval y fantasía oscura, una fantasía no invasiva, un pequeño grupo que se forma en busca de un rey desaparecido, una criatura bastante fascinante, el lingual que se asemeja a un pequeño dragón pero sin ser un tragafuegos en toda regla…, todos los elementos van encajando y ganando espesor poco a poco en este álbum que goza de una poderosa ambientación y personajes potentes. Pero Desberg se toma su tiempo. Porque es un autor reconocido ya en la BD y sabe establecer una atmósfera oscurantista para darte de comer poco a poco y con el paso de las páginas hacer que quieras saber más y más.
Este volumen recoge los dos álbumes que tuvo la historia en su formato original. En Shayne, Chaiko, el autor de el rey mono, se alía con el mítico Stephen Desberg para ofrecer una obra de fantasía crepuscular cargada de originalidad, violencia y pesimismo. Sin embargo, con lo que ya percibimos, esta historia tiene buenos puntos fuertes, aunque creo que Desberg se siente menos cómodo en este tipo de escenario que en sus historias de espías contemporáneas o sus thrillers con geopolítica compleja (no olvidemos en el lío que se metió con Hell). Así que, por el momento, os puedo decir que las buenas sensaciones con este volumen ya eran algo esperadas. Una historia lo suficientemente sustentada como para despertar interés, con la esperanza de que no descarrile y no lo hace y con un dibujo molón de Chaiko. Y es que descubrí a este diseñador chino en La chica de Shanghai donde su línea era muy fina y elegante, en cambio me decepcionó mucho con Francisco I, donde ni siquiera lo reconocí en absoluto. Pero aquí adopta un frente más cargado si cabe, y más cercano al primer álbum donde lo conocí. El dibujo es cuidado, reproduce bien la atmósfera semi-apocalíptica que reina en este viñetario fantástico y gracias a coloreados oscuros y brumosos, nos enseña que los dibujantes chinos también pueden hacer obras clásicas franco-belgas como si de nativos se tratara.
La sinopsis dice así:
Tras la desaparición del rey y su corte, el reino donde vive Shayne, una soldado veterana retirada, se sume en la violencia. Lo único que importa es la supervivencia en medio de la oleada de asesinatos y crímenes que los rodea. Junto con cuatro personajes muy distintos entre sí, Shayne debe escapar de una ciudad a punto de convertirse en ruinas…
Me gusta la idea inicial de que un reino caiga en la violencia sólo porque quienes gobiernan al pueblo han desaparecido. Interesante esta miniserie de Desberg de la que dicen al otro lado de los Pirineos que es la mejor de los últimos años.
Opinen ustedes.