Nunca me habían convencido del todo las producciones de Tebo que había leído hasta ahora. Me parecieron sencillamente agradables y poco más. Aún así, algo me decía que con el tema-pitufo lo iba a bordar. Había escuchado cosas maravillosas de ¿Quién es ese pitufo?, y lo cierto es que este álbum que publicó hace nada Norma Editorial me ha encantado.
Y no me equivoqué. Un álbum donde claramente Tebo rinde un excelente homenaje al mundo de Peyo, y por supuesto, el escenario es ligero y está dirigido a jóvenes o a todos aquellos que siempre disfrutamos con el pitufeo. Pero funciona bien. El dibujo es muy dinámico y el hecho de que se aleje del estilo de Peyo un poquito no molesta.
El ritmo es dinámico también y el tipo de humor funciona. Me reí varias veces mientras leía y se siente que además Tebo se divirtió creando para este universo donde logra comunicar su entusiasmo. Lo digo en serio, me divertí mucho leyendo este álbum como un jovenzuelo leyendo cómics de risa.
Hay que decir que Tebo escribió una historia de Los Pitufos, mientras que en otros álbumes del mismo género parece que los autores escribieron un guion y luego añadieron un héroe conocido (como Spirou) para atraer al mayor número de lectores posible. Y es cierto que para disfrutar al cien por cien de lo que se cuenta en ¿Quién es ese pitufo?, para engancharse del todo, hay que amar el universo de Los Pitufos desde siempre. Porque no es un homenaje en sí, sino más bien una historia de autor basado en un mundo creado por un maestro. Pero Tebo consigue la hazaña de pitufar un cómic sin pitufar el espíritu que Peyo inculcó a estos pequeños duendes azules; el ritmo sostenido compensa una trama bastante lineal sin ser débil donde el autor cautiva al lector con su montaje casi cinematográfico.
¿La historia? Un pitufo que no habla pitufo, que ha pitufado la memoria y al que no pitufa ningún pitufo. ¡Y así empieza una aventura pitufante! Donde se va a pitufar sobre quién es este pitufo, y nuestros valerosos pitufos tendrán que pitufar numerosos peligros e innumerables pituferias… El genial artista Tebo nos ofrece su personalísima versión en un álbum que rebosa originalidad, diversión y frescura.
Así que… ¡A pitufar sin demora!