Puedo decir sin miedo a equivocarme que este álbum se realizó con el único objetivo de concienciar a las nuevas generaciones sobre el deber de RECORDAR. Efectivamente, no podemos decir que leamos Auschwitz con el objetivo de divertirnos, porque leer una historia que muestre el horror que vivieron los deportados en el campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau, no es la mejor manera de pasar un buen rato. Si hablamos del tema moral, obviamente. Porque leer siempre es bien. Pero insisto: este trabajo fue realizado para que no olvidemos esa parte de la historia y las millones de víctimas del nazismo en todos los sentidos. Pascal Croci, ilustrador y guionista, de este álbum que publica en nuestro país Norma Editorial, hizo todo lo posible para mostrarnos la vida cotidiana del más famoso de los campos de exterminio y desafortunadamente (o afortunadamente) logra mostrarnos lo atroz y horrible que pudo ser pasar por allí.
El cómic nos lleva a conocer la historia de una pareja yugoslava que sobrevivió al infierno de Auschwitz y, sobre todo, nos muestra lo que soportó esta pareja, así como muchas otras atrocidades que sufrieron los deportados que pasaron por dicho lugar. No nos divertimos leyendo pero, sobre todo, aprendemos que el objetivo de los deportados era únicamente sobrevivir día tras día. En mi opinión, este cómic es ante todo un documental sobre el campo de Auschwitz y le daría todos los premios que se le pudieran dar a un cómic así. Porque además no es ficción al completo. Croci se inspiró en testimonios de supervivientes para mezclar ficción con realidad. Lo que depara un volumen interesante que además aporta y explica la génesis así como la correspondencia con determinados testigos.
El dibujo de Pascal Croci capta todo el horror de la vida en estos infiernos. El blanco y negro es sublime y el dibujo de los rostros logra expresar todo el sufrimiento que vivieron aquellos presos. Cuentan los que vivieron en aquellos tormentos que llegó un momento en el que todas las expresiones humanas parecían iguales y por tanto empezó a ser difícil reconocer a las personas. De hecho, en esta lucha diaria por la supervivencia no es sorprendente que personalidades y, sin duda, sus rostros, se fusionaran. ¿No es un esqueleto siempre similar a otro?
He leído por ahí que este cómic se hizo famoso por ser el único que cuenta bien los hechos ocurridos en la ex-Yugoslavia. Los invito a profundizar en ciertos testimonios de la época que les permitirán conocer las motivaciones de algunos de los beligerantes y verán que estuvieron muy unidas estas dos guerras pese a los años de diferencia entre ellas.
El diseño es particular pero sigue siendo muy exitoso. El blanco y negro no hace más que reforzar el horror que nos transmiten la mayoría de las páginas. Este estilo de dibujo se utiliza con el único objetivo de impactar, por supuesto, pero también para mostrarnos que no había nada hermoso en esos agujeros malditos. Estamos ante un cómic de la BD pero no tenemos un dibujo bonito sino más bien duro, serio y en perfecta sintonía con la historia. Hecho adrede. El objetivo principal de Pascal Croci es sorprender al lector con la horrible realidad histórica, y aunque creáis que a uno/a ya no le va a sorprende nada…, recomiendo leerlo porque logró hacerme entender que uno de los infiernos que se han podido conocer en este mundo es, sin duda, Auschwitz.
Una de mis profesiones frustradas, una de las que me llevaré a la tumba, es la de profesor de Historia. Auschwitz, de Pascal Croci, es el tipo de trabajo que hubiera incluido en un plan de estudios.