En Los Perdidos se nos lleva a saber más de la vida de Emmy. Y qué queréis que os diga, es bueno ver a Emmy en un nuevo entorno, una nueva historia del condado de Harrow, historias interesantes con un dibujo fantástico, historias que siempre dejan con ganas de más. Entonces, ¿Emmy está en la gran ciudad y se encuentra con nuevos desafíos? ¿Está ella realmente dispuesta a hacer esto sin poderes? Realmente depende de cuán perdida y sola haya estado, ¿no? Los últimos arcos de Historias de Harrow County (Tales from Harrow County) han estado centrados en Bernice Anderson como protagonista pero en Los Perdidos volvemos a Emmy Crawford, la protagonista de la serie original, y esto es para mí, como mínimo, emocionante. Porque además me habían advertido que cambia radicalmente la serie original en cuanto al futuro. Y cierto es. Han pasado diez años desde que Emmy dejó el condado de Harrow. Desde entonces, han pasado muchas cosas en la ciudad pero, ¿qué le sucedió a la propia Emmy y qué aventuras ha emprendido desde que perdió sus poderes y se fue de la ciudad con el Abandonado? En esta historia épica y esencial, descubrimos dónde le ha llevado la vida y qué peligros acechan en las sombras esperando… porque también hay sombras maléficas fuera del condado de Harrow.
De alguna manera, estaba preocupado ella. Después treinta y dos números sufriendo junto a Emmy (las brutales cosas por las que tuvo que pasar) y tras un final agridulce, que duda cabe que la pobre se había ganado un respiro. Realmente no importaba a dónde fuera, todo lo que importaba era que pudiera encontrar algo de paz. Pero en Los Perdidos no encontraremos eso…
Desde la apertura de Schnall, este cómic se siente diferente a todo lo anterior. Ya no estamos en el condado de Harrow, es nuestra amada ciudad de Nueva York y en años de la Segunda Guerra Mundial. Pero no es la Nueva York con la que estamos familiarizados. Podemos ver una ciudad genuinamente desconocida: luces apagadas, la ciudad se transforma, pero esto no es un apagón o una escena de una peli apocalíptica, sigue siendo la bulliciosa ciudad de Nueva York que conocemos excepto que intenta ser invisible durante la noche. ¿Por qué? A través de la oscuridad se filtra lo sobrenatural.
La galardonada serie de terror gótico sureño nominada a un Premio Eisner regresa con una nueva historia. Cullen Bunn (Bone Parish, El Sexto Revólver) regresa con una nueva historia. Aquí junto a Emily Schnall nos hace caminar por la cuerda floja intentando honrar desarrollos de Harrow County que se produjeron antes y lo hacen bien. Siempre está presente la serie original. A ratos, se regresa a momentos o a puntos de la trama principal y eso es súper interesante porque se matizan detalles y se agrega complejidad y riqueza a tan gloriosa historia. Y la aparición de Emmy no es para nada un fan-service. En esta historia es esencial.
Por otro lado, si tuviera que poner una pega a este spin-off es que lamento mucho que Tyler Crook (AIDP, Petrogrado) no sea el dibujante. Pero más que nada porque tal diseñador me inspira con sus dibujos cosa mala. Pero por lo demás, otro cómic chulo de Terror para disfrutar.