Me gustaría ver que no solo por aquí decimos que Nocturna Ediciones trae a nuestro país títulos la mar de interesantes así como exitosos al otro lado del charco. A los amantes del fantástico les gustará saber que aparte de toda la obra del genial Joe Hill, acaba de publicar la conocida antología del gran Alan Moore, un libro de relatos del magnífico autor creador de grandes cómics, algunos míticos y eternos como Watchmen, From Hell, V de Vendetta o la mejor época de La Cosa del Pantano jamás creada. Ahora friends, su Iluminaciones ya está entre nosotros.
Hay muchos comiqueros que consideran al guionista británico, el más grande de todos los tiempos. No sé si lo es, pero que transformó los cómics convencionales para siempre, sí que es cierto. Pocos escritores de cómics del pasado o del presente podrían igualar la subversiva creación (y destrucción) de mitos de Moore o la penetrante planificación psicológica que trajo a un campo que fue ampliamente ridiculizado en ciertos años. Pero (¡Oh spoiler!) Moore se retiró de los cómics hace años, una gran pérdida para sus admiradores y la profesión. Volvía y se retiraba. Metía mano en alguna cosilla (cogía pasta) y se retiraba. Pero afortunadamente, Moore nunca se retiró, en verdad, de la narración. Entre sus idas de olla y sus “brujerías”, se convirtió en un escritor de ficción considerable con libros entre los que se incluye la antología de relatos denominada Iluminaciones. Y aunque ninguna de estas obras ha tenido el impacto de lo que hizo en el noveno arte, que es un tío con un don y una imaginación increíble, de eso no os quepa duda.
Iluminaciones es la primera colección de ficción corta de Moore. Un conjunto de sublimidades espeluznantes con más pirotecnia que el 4 de julio en USA. Tramas como un enfriador de sangre instalado en un burdel de otro mundo o un grupo de tristes investigadores sobrenaturales que deciden dejar de lado los estudios de siempre y pasan a buscar entidades a las que «nuestras taxonomías» nos han cegado. Seres que no están en otros mundo, ni en este, ni en el otro, pero visibles todo el tiempo. O ni eso.
La mitad de Illuminations está ocupada por una novela corta que cuenta la historia del siglo del cómic al rastrear a un grupo de creadores tremendamente disfuncionales y al personaje que inició la locura de los superhéroes. Admiro lo que Moore buscaba con esta historia. Mostrar cómo esta institución aparentemente inocua es su propio tipo de Bestia, tanto en sus prácticas comerciales como en el deseo antidemocrático. Una historia que nos lleva al verdadero hijo pródigo de los cómics de superhéroes, que nació para narrar, pero un relato que a pesar de su destreza satírica y astutas impiedades, se vuelve demasiado críptico, o al menos, a mí me lo pareció. Y que da unos “golpes asesinos” sorprendentes. Con mucho béisbol interno y que trata el negocio del pijameo de forma que hará las delicias de los nerds como yo (y volará sobre las cabezas de los no iniciados). La industria del cómic durante los últimos setenta y cinco años desde el punto de vista de varios personajes.
Moore ha escrito una colección de historias dinamita con un manual de monstruos en su interior. Como seres humanos son tramas que revelan nuestras lógicas, nuestros miedos, nuestros deseos y en una sola palabra cómo de monstruos podemos llegar a ser. En la historia donde un anciano nostálgico decide visitar un balneario de su juventud y se topa con el pasado a la vuelta de la esquina, lo podemos ver.
Le oí una vez decir a alguien que los fracasos de Moore son pocos y sus resplandores muchos. En esta antología se percibe eso.