Retornando a lo verde, de vez en cuando, un poco de verde, eso recomienda el médico. Y tiene más razón que un santo. No lo dejes, de vez en cuando, un poquito de Green Lantern, del mejor de ellos, del que sacó adelante un autorazo como Geoff Johns, un personaje que se notaba que amaba y que se preocupó por que no quedara en el olvido en su paso por DC. Y para colmo, en última instancia, otros autores actuales lo han llevado y no lo han hecho nada mal. Por que Green Lantern cuanto más lo lees, no solo se vuelve interesante el personaje, sino todo lo que le rodea. Siempre me encantó de Green Lantern (del ochentero, no aquel de sus principios que eran casi de chiste las cosas que hacía con el anillo), fueron sus innumerables aventuras intergalácticas. Y eso se ha mantenido. Un ejemplo de lo interesante que rodea a la cultura Lantern es Thaal Sinestro; originalmente un antropólogo del planeta Korugar, con afinidad natural por el orden, como lo demuestran sus meticulosas reconstrucciones de ruinas antiguas. En uno de estos yacimientos arcaicos se topó con un Linterna Verde herido llamado Prohl Gosgotha, le otorgó su anillo y mostró el poder del objeto. Cuando Gosgotha solicitó su anillo después de la batalla para que pudiera mantenerlo vivo, Sinestro le permitió morir y tomó su lugar. Los Guardianes, sin darse cuenta de sus acciones, permitieron que Sinestro se convirtiera en el Linterna Verde del Sector-1417 y ahí se creó un personaje la mar de interesante con miles de aristas, creado por John Broome y Gil Kane como enemigo para Hal Jordan y todo el Green Lantern Corps en 1963. Un personaje que mola mucho cuando es el tema central de un cómic.
Tal como se cuenta en la sinopsis editorial de ECC Ediciones, al comenzar Renacimiento, el guionista Robert Venditti (Hawkman) siguió al frente de las crónicas del Gladiador Esmeralda. Y cuando parecía que iban a terminar de manera agónica, las reavivó gracias a giros inesperados que perpetuaron el legado dejado por Geoff Johns. Pues yo no lo habría dicho mejor. Este primer recopilatorio de Hal Jordan y los Green Lanterns Corps contiene dos buenos arcos argumentales; el que inicia y da nombre al tomo, La Ley de Sinestro, y otro muy interesante, sobre todo, para gente amante de los buenos cómics de Ciencia Ficción llamado Luz Embotellada. Bien, pues me alegra decir que La Ley de Sinestro, de Robert Venditti, me ha dejado alucinado. Un comienzo tremendamente positivo para esta Era que pone en marcha la serie con un volumen de apertura increíble. La colección comienza de una forma que funciona tanto para lectores nuevos como antiguos. Luego, continúa representando escenas fantásticas de acción y escenas apasionantes de suspense, creando una narración dinámica en todo momento, y mientras todo esto sucede, personajes como Hal Jordan, Sinestro, John Stewart, Guy Gardner y Soranik tienen momentos para mostrar lo que los hace geniales. Todo un volumen que se siente como una celebración de los conceptos que impulsan a Green Lantern…, que se vuelve agradable por diversas razones.
La primero es que la Ley de Sinestro transita muy bien sus personajes de Los Nuevos 52 a la era Renacimiento. En lugar de dejar todo y comenzar con una nueva pizarra, este cómic recoge hilos de trama ya intrigantes y los presenta bien para nuevos lectores. La acumulación de poder de Sinestro, la pérdida de las Linternas Verdes y la lucha de Hal Jordan contra sus propias habilidades; son puntos interesantes de la trama que continúan aquí. Sin embargo, ninguno de ellos se incluye en la historia de una manera que los haga inaccesibles para lectores iniciados. Lo segundo es, que la Ley de Sinestro cuenta con mucha acción pero simple y llana. Un cómic simplemente (reitero) emocionante que cautiva sin mucha profundidad. De principio a fin. E inmediatamente presenta a los lectores una gran premisa: Sinestro tiene casi el control del universo y está listo para llenarlo de miedo, mientras que los Green Lanterns están en uno de sus puntos más bajos. En el transcurso de este volumen, los Green Lanterns pueden superar probabilidades casi abrumadoras debido a la fuerza de voluntad y al conocimiento de que lo que están haciendo, es correcto. Esto lleva a un momento épico hacia el final.
Luz Embotellada cuenta como los Green Lantern Corps vuelven a funcionar pero, ¿cómo protegerán el universo con el Sinestro Corps como socios? Una idea curiosa.
Una vez más, un buen tomo de ECC, con páginas de diseño gráfico de un Rafa Sandoval (Flash) deslumbrante, ayudado de las tintas de Jordi Tarragona, y combinado con dibujante experimentado como es Ethan Van Sciver. La etapa Renacimiento supuso terminar con las propuestas planteadas en los últimos años de Los Nuevos 52 y recuperar el “status-quo” de todos los personajes de la editorial. Incluso respetando los equipos creativos que estaban teniendo hasta la fecha. Gracias a los cielos que Robert Venditti, tras la marcha de Geoff Johns, mantuvo enormemente bien a los centinelas de la Luz Esmeralda. Cosa que se demuestra aquí.