Un cómic brillante como conjunción de historias. ¡Aplasta el patriarcado! Este alegato puede sonar como una forma militantemente agresiva a la hora de empezar la reseña de un cómic que aunque se publicará por partes, podría formar perfectamente una buena y gorda a la vez que interesante novela gráfica. Pero a decir verdad, dicha máxima no es otra cosa que el resumen perfecto de Cosmoknights, de Hannah Templer, una historia sobre mujeres que recorren la galaxia buscando conseguir derrotar un sistema feudalesco que a pesar de todo su carácter futurista y atavíos, está impregnado de misoginia como nuestra querida historia europea del siglo XIV.
En una galaxia donde la humanidad se ha extendido a innumerables mundos, toda la progresión social de los siglos XX y XXI parece haberse desvanecido en el aire, y así, mientras hay cohetes, computadoras avanzadas y la capacidad de hacer casi cualquier cosa en formas que parecen tan avanzadas para los simples mortales, también hay un sistema realista arraigado que esencialmente coloca al 1% en un lugar intocable lejos del pedestal que razonablemente podrías pensar que dejó de existir cuando la gente abandonó la Tierra y partió hacia las estrellas. Pero por desgracia no es así. Y mis idealistas y personajes favoritas desde ya en el mundo de Cosmoknights, son princesas echadas pa´lante, pelean en cada planeta, recordad, no estáis o deberíais estar en un mundo establecido para sufrir. ¡Solo se vive una vez!. Ningún valor o posición y, sobre todo, ninguna familia real debe oprimiros. Menudo alegato hace Hannah Templer en este cómic publicado por Editorial Astronave. Y es que aparte de grandes torneos, compañeras de vida, amor e intento de destrucción del patriarcado, Cass y Bee, están tan furiosas que se han propuesto destrozar este sistema enloquecedoramente misógino que les rodea. En el planeta Viridian, se encuentran con serios problemas, cuya resolución los pone en contacto con Pan, un mecánico del taller del padre de una de ellas que anhela involucrarse en algo más grande y mejor que el universo en el que viven. Y ahí se lía.
Si todo esto suena súper serio, en muchos sentidos lo es. Es un cómic que gracias a la escritura vívida y chispeante de Hannah Templer, se pone serio aunque en realidad estás degustando una trama muy digerible con salseo de space-opera conseguido. Templer es una dibujante y diseñadora gráfica súper interesante además de considerarse queer. También es una artista que ha trabajado en IDW Publishing y Netflix y en proyectos muy reconocidos como colorista y diseñadora de portadas e interiores. Y tiene el genial «defecto» de promocionar su amor por el rol y los juegos de mesa. Algo con lo que sabéis que me identifico bastante. Es una polifriki como yo.
Como os decía al principio, Cosmoknights es un cómic genial en lo que respecta a la construcción de ideales y mundos. Obra divertida y con reparos. Pensad en ella como una cucharada de azúcar antes de que la medicina se acerque. Cass y Bee, eternas.