Los amantes del buen cómic ochentero, el mejor, el mejor de lo mejor, sabrán que están de enhorabuena si se hacen con joyitas recopilatorias de la obra José Luis García López, en este caso, con el orejas picudas en la época dorada de DC. Qué no la Edad de Oro, ¿eh? Con nombre y apellidos muy comunes, pero con un don para el noveno arte nada habitual, el señor García López es y fue un maestro español que triunfó al otro lado del charco en la potente DC de los 70-80. Aun nacido en Pontevedra, pronto emigró a Argentina junto a su familia y a mediados de la década de los setenta se trasladó a nuestra amada Nueva York, donde todavía vive y sigue dibujando cómics y realiza arte promocional, principalmente para DC. Como bien indica ECC Ediciones, por sus talentosas manos han pasado los grandes iconos de la editorial, como Batman, Wonder Woman y el Hombre de Acero. Destacando las historias recopiladas en Grandes Autores de Superman: José Luis García-López- Superman contra el Mundo o Superman y los mejores superhéroes del mundo; dos tomos súper indispensables y de buena calidad como este que os reseño hoy.
Comenzaré diciendo que ya sólo por tener un one-shot como fue El Corazón del Vampiro, número que estuve años buscando para mi colección como amante del género de Terror en todas sus formas… Ya sólo por eso, este tomo era indispensable para mí. Una historia donde Alfred y Bruce están a millas de distancia de la civilización cuando su automóvil se calienta misteriosamente y acuden a pedir ayuda a casa cercana abandonada que tiene todas las ventanas tapiadas. Buscando agua para el radiador (¡Años 80!), en el interior descubren un ataúd y un candil muy antiguo que Bruce rompe accidentalmente. Al separarse para continuar con la búsqueda, son atacados por un vampiro. Gustav Decobra sale del ataúd y ataca a Bruce, quien se pone en modo Batman rápidamente y…
Tenéis que haceros con esta joyita.
Y más, obviamente, bastantes números más en un volumen de casi quinientas páginas que vale su peso en oro. Encontraréis aventuras donde Superman y Batman investigan la muerte de tres mafiosos y cuando se dan cuenta se topan con un complot para asesinar a todos los criminales de la Tierra. Pero no es una trama muy loca, todo lo contrario, molona a mil cuando te enteras que el cerebro criminal de este plan es un viajero del tiempo llamado Robespierre Two, que quiere evitar un futuro catastrófico destruyendo a las peores lacras de la humanidad. Y más. Bruce Wayne y/o Superman siendo testigos de horribles tramas como la de que muchos de los superhéroes de la Tierra están siendo sustituidos por clones. Y… ¿todo indica a qué los culpables es una oculta tribu africana? Giro tras giro. Wonder Woman destruye un misil guiado a Londres. El Dr. Psycho usa su poder mental sobre el sargento Rock, ¡y Rock apunta su arma a la Mujer Maravilla! Un jefe pandillero amante del wrestling entrena a dos luchadores profesionales y los instruye en movimientos capaces de evitar todos los golpes que Batman es capaz de dar después de haberlo estudiado a fondo. Y cómo no, one-shots que eran un disparo al corazón, de fuerza poderosa para el atractivo en kioscos como ¡El verdadero Batman será el siguiente en morir!, donde en una recaudación de fondos de una fiesta de disfraces, un hombre vestido como Batman muere en los brazos de Bruce Wayne; se le quita la capucha y se le identifica como el teniente Bucky Dunlop. Las palabras EL VERDADERO BATMAN SERÁ EL SIGUIENTE EN MORIR ha sido tatuado en su frente. Gordon está allí y ordena a todos los asistentes, incluido Bruce, que se aparten pues sabe algo que nadie sabe y…
Con una grandiosa carrera detrás, José Luis García López es todo un referente en el mundo de los superhéroes. No conocerlo, a poco que ames el pijameo, se puede considerar delito. Se encargó del apartado gráfico de grandes títulos como Jonah Hex, Hercules Unbound y Deadman, entre otras muchas. Desarrolló la serie limitada de ciencia ficción Twilight junto a Howard Chaykin, una maravilla que espero que se recupere pronto en nuestra querida tierra de conejos.
También colaboró en las cabeceras Batman Confidential, Universo DC: Legados, y participó en las antologías Wednesday Comics y Batman: Black and White. Pero más. Bastantes más. Un autor del que te enamoras fácilmente y que marcó el estilo de la Casa DC a finales de los 70 principios de los 80. Y eso no es moco de pavo.