Reseña: Thorgal. Wendigo, de Fred Duval y Corentin Rouge

Wendigo es la nueva aventura disponible de nuestro vikingo favorito, esta vez de la mano de Fred Duval y Corentin Rouge, dúo que ya vimos en XIII Mystery con el álbum de Calvin Wax. Wendigo sitúa su trama justo después del ciclo del país Qâ, justo cuando Thorgal y su familia están de regreso. Sin embargo, se verán obligados a tener que hacer escala “forzada” en una América del Norte que comienza a resurgir y con un pueblo que recuerda a los iroqueses.

Con esta nueva aventura súper chula a nivel argumental, mucho más allá de la serie original tal y como se reproduce actualmente, los autores Fred Duval y Corentin Rouge han firmado un álbum muy bueno. Aunque debo decir que este álbum todavía está un poco por debajo de Adiós, Aaricia, en mi opinión. Pero también puedo decir que Wendigo, con el tiempo, se afirmará como el pináculo de la serie Thorgal. Pues estamos ante un spin-off de Los mundos de Thorgal que nos lleva a navegar hacia las tierras del país de Qâ, antes mencionado, y donde Thorgal, Aaricia y Jolan se encuentran atrapados en medio del conflicto entre la Gente del Agua y la del Bosque. Pues sus respectivas deidades ahora están desatadas y nada puede obstaculizar el caos que los llevará a la guerra. Excepto, claro está, una flecha tallada en el Árbol de la Vida, disparada contra el temible Wendigo. No obstante, para salvar a Aaricia, embarazada y herida, Thorgal no tiene más remedio que tomar partido y comprometerse una vez más hacia la locura que parte de los hombres…

El dibujo de Corentin Rouge casi no sufre críticas, salvo quizás la falta de detalle en los fondos de algunas viñetas (a menudo vacías) pese a que tenemos un escenario que se basa en los cánones Thorgalianos que conocemos desde hace años. Pero considero que estamos ante un álbum muy recomendable para los amantes del personaje desde siempre. Y es que Thorgal está disponible en múltiples subseries, en torno a personajes clave. Y también da la posibilidad a los autores de dar su versión del héroe a su gusto. Por eso, concretamente, deespués de disfrutar de Adiós, Aaricia (https://www.cronicasliterarias.es/?p=14554), lo volví a hacer con este Wendigo.

Una valoración rápida sería decir que la lectura fue placentera, fluida y deja con ganas de más. El dibujo de Rouge es realmente genial y ayuda mucho al placer de leer y degustar un buen cómic europeo. He tenido la genial oportunidad de leer este álbum en la edición recién estrenada por Norma Editorial en nuestro país; formato grande y con una portada digna de lienzo creado por Robin Recht. Una portada sublime incluida afortunadamente en el cuaderno gráfico de la edición limitada que vio la luz al otro lado de los Pirineos de este modo. El guionista Fred Duval (No sueltes mi mano) y el dibujante Corentin Rouge (Río) plasman su visión personal de Thorgal en una historia inédita, pero muy respetuosa con el canon del vikingo ideado por Jean Van Hamme y Grzegorz Rosinski. Una buena aventura, clásica en su desarrollo, una historia que podría integrarse fácilmente en la cronología oficial.

Reseña: Adiós, Birkenau, de Jean-David Morvan, Matet, Roger y VVAA

¿Otro testimonio sobre el horror de los campos de concentración? Si es un cómic interesante y está bien hecho: SIEMPRE DIRÉ SÍ. Porque con Adiós, Birkenau, debo admitir que, a fuerza de haberlo leído, tengo la impresión de haber creado una especie de caparazón de insensibilidad, de no sentirme particularmente conmovido con una historia más de dolor sobre la IIGM. Pero siempre siendo súper consciente de que estamos ante una nueva historia que no dejará indiferente a nadie. Y ahora os digo más: Adiós, Birkenau consiguió quebrar ese caparazón. La personalidad de Ginette Kolinka y especialmente la forma tan natural en la que cuenta su historia hacen que los hechos sean tan realistas que a mis ojos se volvieron aún más impactantes. Destacaron varios puntos que me llamaron la atención: su descuido antes de darse cuenta de lo que realmente le esperaba, su progresiva deshumanización orquestada por los nazis, su necesidad de transmitir después de un largo período durante el cual nunca quiso hablar de lo que había vivido… La historia se construye en dos momentos, lo que nos permite seguir a Ginette Kolinka, por un lado, mientras acompaña a un grupo de jóvenes estudiantes a Birkenau; y por otro la crudeza de la guerra. Idas y venidas que nos permiten visualizar el horror al tiempo que resaltan la necesidad de transmisión de Ginette. Una forma de proceder que acentúa el aspecto “testimonio” de la historia al tiempo que arroja luz sobre la personalidad del autor. ¿Qué ocurre? Que el dibujo no lo vi muy allá pero con el paso de las hojas empecé a enamorarme de él.

Me gusta todo lo relacionado con la representación de los personajes y también me gusta la idea de estas sombras que los ilustradores representan en la oscuridad de los campos de concentración. Por otro lado, varios de los escenarios me desagradaron mucho porque parecían retocados a partir de una fotografía y esa forma de ilustrar no me mola.

Un tema que no es nuevo y las historias de este tipo son numerosas. Es obvio. Pero os puedo decir que es la primera vez que la historia de Ginette Kolinka se ilustra en un cómic y solo por eso, y por las buenas sensaciones, vengo a recomendaros este título de cómic europeo que publica Norma Editorial y que recientemente ha sido anunciado como uno de los nominados al Prix des Lycées 2025 entre los que está también el magnifico El dios salvaje, de Fabien Vehlmann y Roger Ibáñez, que os reseñé hace no mucho.

En Adiós, Birkenau estamos ante un cómic que me pareció conmovedor y bien pensado. Una obra que, sin duda, contribuye a preservar la memoria del horror que supusieron los campos de concentración nazis. El riesgo de los testimonios sobre la deportación es convertirse en un lector hastiado, volviéndose insensible al horror por haberlos leído varias veces. Un sentimiento casi natural contra el que obviamente debemos luchar, ya que este horror es inolvidable y las palabras de los supervivientes pronto necesitarán las nuestras para continuar este necesario trabajo de memoria. Sobre todo, cuando vemos a los revisionistas de todas las tendencias y a los fascistas de todo tipo de personas que quisieran empezar de nuevo con este tipo de tragedias.

Aquí se exponen dos ideas: saber diferenciar el bien del mal y conocer la vida de Ginette Kolinka. Una persona hermosa, a quien la inmundicia nazi, pese a todo, no logró dañar.

Reseña: Los Sacrificadores, de Rick Remender, Fiumara y Dave McCaig

La súper recomendación que se hacía sobre este cómic era no leer nada, nada de nada, de sobre qué iba su argumento. Eso decían cuando se publicó en USA la primera grapa de Los Sacrificadores. La sinopsis aportada, diseñada para conseguir pedidos anticipados y compras ligeras, ofrecía un discurso de presentación del comienzo de una nueva aventura de pura fantasía, pero al hacerlo revelaba demasiado. La nueva Fantasy que nos estamos encontrando en algunos cómics, en algunos de grandes autores, es un género que busca expandirse, y normalmente contiene una amplia gama de nuevos escenarios grandiosos, nuevas sociedades creadas desde cero a partir de recursos mágicos y cantidad de razas ficticias. Y siglos de historia, siglos de ambición para la ampliación de esos mundos. Y eso concretamente es lo que vamos a encontrar en esta nueva serie del gran Rick Remender que acaba de publicar Norma Editorial en nuestro país. Una aventura con escalas que requiere tiempo para explorarse pero que se disfruta de todas-todas si entras ella. Porque Los Sacrificadores tiene dos protagonistas adolescentes muy diferentes que definen dos aspectos desiguales de un nuevo lugar fantástico. El primero es un joven sin nombre (o más bien, un humanoide de plumas azules) al que se hace referencia simplemente como «el niño» o «el hijo». El sacrificador titular, que se menciona pero no se explica, proviene de una clase rural de personas que viven en una granja idílica, excepto por el niño que se mantiene y se abandona en el granero…

La segunda es Soluna. La hija de figuras divinas que parecen encarnar el sol y la luna, la misma que finalmente llega a la edad adulta y siente curiosidad por aprender más sobre el mundo que los rodea. La vida en un mundo perfecto que siempre tiene un precio. Porque los dioses exigen el sacrificio de un hijo por familia, pero la cuestión es: ¿En qué consiste ese sacrificio? ¿A qué lugar llevan a los sacrificadores? Puede que el sacrificio sea la simple separación de seres queridos, o quizá la vida misma, solo una larga travesía y el encuentro con los beneficiarios del sacrificio podrán desvelar el misterio para los sacrificadores.

Aunque Los Sacrificadores deja claro que la narrativa se centra en estos deuteragonistas, esboza muy pronto la naturaleza descomprimida en cada secuencia a la que nos vamos a enfrentar. Soluna es rebelde e inteligente; el niño es gentil y decidido, sin embargo, hay suficiente para que los lectores simpaticen con ambos. Aunque el ritmo intencionado retiene mucha información al principio, promete dar sus frutos, ya que establece una base sólida para que se desarrollen las historias de estos personajes y los misterios de su mundo. Y aunque nunca se nombra al niño, el abundante espacio que se brinda a los lectores para observar las oraciones familiares, los encuentros típicos a la hora de la cena y la terrible disonancia cognitiva que exhibe su padre, pintan una imagen clara de dónde viene.

Además, Max Fiumara llena cada viñeta de detalles que animan al lector a detenerse y asimilar la trama a la que está sometido. A lo que suma los resplandecientes dorados y rojos de la coloración de Dave McCaig que evocan la naturaleza mágica y divina de estas entidades y las vinculan con un sentido de clase, ya que contrastan con el hogar rural del niño.

Pura Fantasía bien llevada al cómic.

Reseña: El Último Faraón, de Schuiten, Van Dormael, Gunzig y Durieux

Ocurre como en la novela de aventuras, que dentro del género, existe una especie de subgénero súper atractivo para mucha gente como es el tema del Antiguo Egipto. Reliquias, faraones malditos y momias, seres de ultratumba que luchan por los que es suyo aún en nuestro plano de existencia. También calculadores villanos y especuladores empresarios que hacen todo lo posible por adquirir sendos vestigios para su gozo o beneficio. Para los que estamos al tanto de este subgénero y leemos tanto novelas como cómics (por que lo importante es lo que se cuenta), nos son conocidas Las Aventuras de Blake y Mortimer; genial serie creada por el historietista belga Edgar P. Jacobs, que apareció por primera vez en la Revista Tintín en 1946, aunque tras la muerte del autor, otros grandes autores de la BD han ido continuándola hasta llegar a nuestros días. Y tengo que decir que en general, con una enorme calidad. Norma Editorial es obviamente la editorial que lleva ya unos años trayéndonos este genial cómic, del que he leído varios titulos gracias a mi tito americano, pero nunca hasta ahora había reseñado ninguno. Pero como he disfrutado tanto con El Último Faraón –el último de la serie publicado-, pues ahí va.

Y es que, queriendo ayudar a un amigo, el profesor Mortimer va al juzgado de Bruselas para investigar una poderosa radiación electromagnética. Tras romper una pared, el fenómeno aumenta. Frente a la amenaza, el edificio en el que se encuentra se halla más o menos protegido gracias a la confinación que tienen en una Jaula de Faraday, que bloquea la propagación de la radiación. Pero la ciudad parece completamente condenada. Unos años más tarde, las emisiones interrumpen el funcionamiento de los dispositivos tecnológicos y todo en la Administración parece irse a pique. Las principales autoridades políticas del mundo deciden bombardear el edificio. Acabar con el Mal surgido en el centro de Europa. Temen la propagación y las serias consecuencias que pueda acarrear aquella fuente de rayos cancerígenos. Francis Blake desafía la jerarquía militar y alienta a su compañero a regresar a Bélgica para continuar su investigación…

El Último Faraón es obra del cineasta Jaco Van Dormael, el escritor y dramaturgo Thomas Gunzig, así como por el dibujante François Schuiten. Los guionistas tienen poca o ninguna experiencia en el noveno arte, pero aun así les ha quedado una historia curiosa. Un álbum de casi cien páginas que trata el esoterismo, la política, el terrorismo, el medio ambiente, la ciencia ficción, la fantasía, los monstruos prehistóricos, las terapias de la New Age y las tramas milenarias. El resultado es un álbum particularmente laborioso, con más profundidad de la que uno esperaba. Remueve un maremágnum de ideas bastante actuales en un contexto tan cercano que aterra. La búsqueda digna de la sinceridad del hombre. ¿Progreso o riqueza urgente? ¿Ciencia y descubrimiento o el odio desencadenado? Cómic donde brilla de todas-todas el arte ilustrado de François Schuiten. Después de cuarenta años, uno de los valores seguros del arte secuencial. Su trazo de lápiz sigue siendo excepcional, y como dice mi tío, a lo largo de los álbumes, ha convertido ciudades en actores reales, cada una con su propia personalidad. Sin duda, presenta una Bruselas de una manera bonita y agradable, una metrópolis que sigue siendo hermosa, incluso si cae en ruinas. Para los lectores de culo duro, deciros que Schuiten aquí parece moderadamente inspirado en los personajes de Jacobs. Esos a menudo estáticos, que en otras historias parecen no entender demasiado en dónde se embarcaron. Diría que está hecho adrede. Además se sostiene bastante para los planos amplios en los colores de Laurent Durieux, oscuros y reales, especiales para las escenas de ubicuidad nocturna.

Y algunos diréis: ¿dónde está aquí el tema Egipto? Es que hay más. Os cuento: Pirámide de Keops. Dos hombres están saliendo de un sueño que aparentemente les causó una migraña severa. Están en una habitación oscura iluminada por una delgada vela. ¿Cómo diablos llegaron allí? Bruselas, años después. Un Mortimer envejecido (en la BD los héroes sí tienden a envejecer) va al Palacio de Justicia de Bruselas para responder a la invitación de Henri. quien hizo descubrimientos realmente increíbles… Lo admito, El Último Faraón ha sido para mí una lectura que iba desmereciendo con el paso de las páginas, pero al final me gustó. El dibujo de Schuiten es notable en precisión y realismo y en cuanto al guión, me pareció muy respetuoso con el trabajo original, el espíritu que Jacobs imaginó. Eso no quita que este álbum sea muy distante en estilo a los títulos más clásicos de la serie. Una nueva visión que entiendo que a algunos lectores rancios les provoque una mueca rara. Pero friends, renovarse o morir, ¿no?

Reseña: Felpa, de Doug Wagner, Hillyard, Renzi y Dukeshire

El dibujo más loco y aberrante puede contener la historia más pura que hayas conocido.

No sé si esto lo dijo alguien o me sale de dentro. Pero lo cierto es que con Felpa se cumple de todas-todas. La obra de Doug Wagner esplende aquí en todos los sentidos. Gore y raruno. Weird puro, que dirían algunos. Y más sangriento que Plástico por lo que recuerdo, pero empantanado por un montón de conversaciones y el núcleo emocional que aporta Doug Wagner llega un momento en que cala en tus adentros. Y eso que no me importa que se ponga tierno aquí, que intente contar una historia humana, pero lo que trata es de aporta una travesura divertida y tonta de asesinatos y lo consigue. Historia humana sobre con quién elegimos casarnos… que incluso llega a resultar incómoda.

Hasta donde yo sé, Plástico, Vinilo y Felpa, están escritas por Doug Wagner y entintadas por Daniel Hillyard, en lo que se considera una especie de trilogía. Principalmente por la fiesta sangrienta y desenfrenada que presentan. Y aquí, al igual que en Plástico, tenemos un protagonista que ha tenido mala suerte, pero esta vez no es el asesino. En cambio, se une a los asesinos, que terminan siendo peludos excéntricos que ocasionalmente son caníbales derrochadores de sangre, contra policías de mierda en un pequeño pueblo (muy similar a los policías en Plástico). Es una premisa divertida y extremadamente atractiva que conduce a un montón de gore exagerado y divertido (especialmente la chica con disfraz de perro). Y hay mucho más diálogo que en las anteriores obras y la acción es divertida y emocionante. Y eso que Plástico contenía gran cantidad de diálogo, pero te daba más información sobre el loco asesino en serie a tratar, mientras que aquí se divide entre eso y una historia de amor. Por la cantidad de diálogo que había y que se interponía en el camino de la diversión sangrienta, esperaba un poco más pero eso no quita que haya una historia con bastantes datos interesantes aquí.

En Felpa, un amigo convence a Devin Fulcher de que asista a su primera convención furry. Cuando se topa accidentalmente con un grupo de furros devorando a un ser humano, da inicio la demencial aventura. Y la pregunta es: ¿Ansían la compañía de Devin para merendárselo… o se trata de algo mucho más perverso aún? Si no los conocíais ya, os diré que Doug Wagner y Daniel Hillyard son un dúo increíble para este tipo de historias.

El estilo artístico de Hillyard brindan casi siempre gore detallado y divertido. Y felicitaciones a Rico Renzi como colorista en este caso. Cambia los colores a estos neones intensos durante ciertas escenas, normalmente las sangrientas, y funciona perfectamente para el ambiente de horror creado.

Cómic ideal para disfrutar en Halloween.

Una perturbadora sinfonía de “terror neón” sobre fursuits psicópatas y amor grotesco. Totalmente de acuerdo con la sinopsis editorial.

Reseña: El Cielo en Guerra (Integral), de Pinard y Dauger

Creo que El Cielo en Guerra no se puede definir mejor que con la frase con la que abre su introducción: «Una gran saga en cuatro partes que sigue la historia de la aviación francesa durante la Segunda Guerra Mundial». Y ahora recopilado en un portentoso integral de cómic europeo como sólo Norma Editorial sabe hacer; podemos adentrarnos, sumergirnos en historias, desdenes y batallas espectaculares en el aire, gracias a Philippe Pinard y Olivier Dauger que saben narrar con rigor histórico la historia de la potente aviación francesa de entonces.

Los Diablos Rojos es el primer álbum que comprende la tetralogía. La batalla de Francia vista a través de los ojos de un joven piloto en el famoso escuadrón de combate que marcó una época. Un viaje desde el comienzo del conflicto hasta el armisticio del 22 de junio de 1940. Con la impresionante muestra de la táctica Blitzkrieg en tierra gala. Etienne de Tournemire es un joven teniente recién licenciado que acaba de unirse al escuadrón de los Diablos Rojos; contra toda expectativa, los vehículos blindados alemanes han logrado cruzar las Ardenas, los panzers, apoyados por la aviación, continúan su infernal ataque y amenazan con cruzar el Mosa en el Sedán francés. Estamos ante una de las batallas decisivas de la guerra, pues si los alemanes se hacían con este punto clave, los panzers evitarían la parte mejor fortificada de toda Francia… Etienne de Tournemire y sus camaradas en el centro de la lucha, superados en número, intentarán revertir el curso del destino.

Una curiosa historia se cuenta en Escarapelas en Llamas. Junio de 1940, un verano desastroso para Francia. El escuadrón de los Diablos Rojos sufre una debacle general y se retira al norte de África. El armisticio redistribuye las tropas y se rompen algunos juramentos de lealtad. A partir de ahora, se tendrá que elegir entre volar bajo los colores de Vichy o participar con las Fuerzas Francesas Libres. Todo se precipita y Francia camina a marcha forzada hacia la derrota. Las retiradas y las deserciones se suceden a un ritmo infernal. Llegan a orillas del Loira, donde Etienne y su compañero André Marceau mantienen su última batalla antes de unirse al norte de África. Pero un nuevo evento cambiará sus destinos: el drama de ver a la flota francesa siendo bombardeada por los propios ingleses. El compromiso de los pilotos franceses contra sus aliados de ayer es solo la premisa de una confrontación aún más cruel.

¿Era indispensable en una serie así el álbum Alerta en Siria? Sí, si deseamos tener en cuenta todo lo que sucedió durante las últimas horas de combate aéreo en junio del ´40. Completar en nuestra cabeza lo ocurrido, hasta el bendito aterrizaje aliado dos años después. Tensión, locura, desazón, una letanía de quejas constantes ante un miedo creciente: ¡Y los refuerzos! ¡Cuándo llegarán más aviones, armas más poderosas! Decenas de clichés que reconoceréis aquellos fans del buen cine bélico, asiduos a documentales o hayáis leído libros relacionados con la ocupación final de París. Brillante en este cómic la filosófica conversación sobre Kant entre un personaje y un oficial alemán.

Con Operación Tourch llegamos al final de esta entretenida tetralogía. Noviembre de 1942. Por fin, los escuadrones angloamericanos llegan como apoyo al norte de África defendido aún por el ejército de Vichy. Los escuadrones franceses contra los aviones aliados apoyan el combate hasta el alto el fuego… Épica y más épica.

Apreciando y poniéndonos del bando de los perdedores, los autores nos introducen en un bando francés que intenta preservar los intereses de un invasor que se vuelve más temible cada día. El dibujo es magnífico (como ocurre siempre con Dauger), y los colores permanecen a buen nivel de un álbum a otro (me gustaron mucho los verde-marrón-blanco de Europa y los beige-ocre para África-Siria-Iraq). Un guión instructivo, patrullas y escaramuzas en el cielo, épica durante cuatro días de intenso combate. Álbumes que se dejan leer con verdadero placer. Y aunque no encontraréis personajes entrañables, algunas de sus conversaciones se os quedarán grabadas por siempre. Un espectacular integral que hará las delicias de los aficionados al cómic bélico.

Reseña: Radiant Pink. A Través del Universo, de Camarena, Flores y Emma Kubert

No ha pasado mucho tiempo desde que tuvimos un buen cómic de superhéroes en Image Comics. Y ciertamente ayuda que el más famoso bajo su estandarte: Invencible (una serie que recomendé al comienzo de la pandemia) sea ahora un favorito entre los fans de todo el mundo. Además, tiene actualmente una serie animada categorizada con un cinco estrellas que lo peta entre todo el que lo ve. Y es que desde hace unos años hay pedigrí nuevamente en esta editorial norteamericana y algunas expectativas de cuando se evoca la palabra “superhéroe” en toda regla, se hace bien. Es difícil no hacer comparaciones instantáneas con el mercado saturado de superhéroes preconcebidos, por eso, la primera incursión de todos los Radiants en su propio universo le está molando mucho al público en general. Porque tienen un comienzo visualmente impresionante y enganchan al estilo del Invencible de hace años (lo siento, la comparación se me hace inevitable).

Soy bastante nuevo en el universo Radiant (aunque siempre he tenido debilidad por el nombre desde el genial Radiant Archangel de Magic: The Gathering). Sin embargo, creo que lo he clavado al empezar con Radiant Pink pues es una excelente manera de comenzar con la historia de fondo y las aventuras en curso de esta nueva superheroína.

Veamos los elementos en juego.

Eva es una streamer de videojuegos que intenta mantener su vida unida frente a las dudas sobre sí misma y las críticas de las personas que no creen que lo que está haciendo sea un trabajo real. Una de estas últimas es su futura ex-novia, que no se toma muy en serio sus patrocinios ni sus factores estresantes. Cuando el micrófono de Eva se estropea una noche, su búsqueda desesperada de un reemplazo la lleva a un símbolo misterioso que, al igual que el resto de sus contrapartes Radiant, le otorga superpoderes. Como Radiant Pink, Eva puede teletransportarse de un lugar a otro a través de portales de color rosa neón. ¡Esto mola! Ella usa sus nuevas habilidades no solo para luchar contra el crimen, sino también para promocionar su transmisión, recaudando cientos de miles de dólares para caridad desde su pequeño dormitorio en Indiana hasta otras muchas cosas. Pero ni siquiera un teletransportador puede estar en dos lugares a la vez, por lo que tiene que convencer a su mejor amiga Maddy para que la ayude a mantener en secreto su identidad mientras Radiant Pink aparece de vez en cuando para aumentar la audiencia en el canal EvaPlayys. No obstante, a Maddy le preocupa que Eva se esté esforzando demasiado. Eva afirma que convertirse en superhéroe también ha disminuido su necesidad de dormir. Y cuando la última aparición benéfica de Eva en un hospital de niños sale terriblemente mal, entonces ahora vienen todos lo problemas.

Me encanta que Eva sea morena y queer, y que sus intereses amorosos sean minorías. Como soy un nerd-friki-viejoven motivado con elecciones profesionales poco convencionales, simpatizo totalmente con su necesidad de demostrar su valía, incluso en su propio detrimento. Pero lo más importante es que me encanta cómo, en última instancia, ella decide priorizar su propia salud, lo que da un ejemplo muy importante a lectores jóvenes y mayores.

Un cómic fabuloso que trae Norma Editorial, como no podía ser de otra forma, donde la popular streamer Meghan Camarena se une a la escritora de cómics Melissa Flores para trazar y escribir una historia llena de verosimilitud.

Incluso hay cameos de otros Radiantes.

Esto divierte de verdad.

Reseña: Stranger Things. Historias de Hawkins, de VVAA

A los fans de la serie y los cómics nos faltaba tener una antología de mini-historias de terror ambientadas en este famoso pueblo donde se podría decir que ya ha pasado casi de todo. Pero mentes con dones de la creación han dicho que no y proponen más relatos ocurridos en la superficie de Hawkins, este lugar que parece el típico pueblo donde nunca sucede nada extraordinario, pero sucesos extraños empiezan a afectar a sus habitantes cada no mucho tiempo.

Concretamente, en este Historias de Hawkins vamos a encontrar cuatro historias muy sólidas de las que ya os adelanto que mi favorita es la de Murray, ya que es un personaje al que finalmente se le dio la oportunidad de brillar en la serie de TV. Por otro lado, también os puedo decir que la de Robin fue quizás la más madura pero la de Murray es que…, quizás se ha convertido en una de las subtramas de esta serie que más me ha encantado. Aunque quizás sea porque Murray es uno de mis personajes favoritos y fue un placer conocer más de su vida y ver que sí, que realmente le importa encontrar a Barb… o lo que quiera que le pasó entonces. Relato ilustrado y escrito de forma genial donde realmente se captura la voz de Brett Gelman como el personaje. El capítulo final, que termina con una nota feliz, parece un buen punto de inflexión con respecto a las tendencias más sombrías y pesimistas de estas historias.

Y mola ver que son historias que enganchan y saben juntar las piezas del rompecabezas para con todo lo acontecido en la serie de televisión. Se añaden pequeños detalles al marco narrativo de la serie principal y eso siempre mola. Pero además no cambia tú visión de los personajes, cosa importante, aunque también os digo que la historia de Maya es la más cortita en calidad y puede provocar bostezos. La parte sobre la necesidad de salir de uno mismo, un poco sacada de Hesse, es un toque reflexivo que nos dice bastante sobre los intereses y el conocimiento de Maya como personaje.

Cuatro historias que agregan un poco de profundidad a un par de personajes secundarios y luego agregan un poco de profundidad a algunos elementos de la trama de temporadas anteriores. Como grandes fans de la serie, mi familia y yo, hemos disfrutado muy mucho de estas historias especialmente bien escritas. No te pierdes nada si no las lees, pero ganarás en profundidad si devoras el cómic y vuelves a revisionar alguna temporada o para estar preparado para la próxima que está al caer.

Otra vuelta a la nostalgia ochentera.

Como todos los anteriores, cómic ideal para el próximo Halloween.

Reseña: Hellboy y la A.I.D.P. 1957 , de Mike Mignola y VVAA

Hellboy y la A.I.D.P. recopila algunas de las primeras operaciones de campo de Hellboy para el bureau más famoso creado por Mike Mignola. Comenzando con el 1952 y saltando cronológicamente de un año a otro, Norma Editorial nos trae ahora el título denominado 1957 donde nos vamos a las misiones realizadas en ese año. Nuevas historias que ahondan en el pasado del Chico Demonio como agente primerizo de la A.I.D.P., seis nuevas aventuras del pasado de Hellboy que son toda una delicia.

Big Red y sus compañeros agentes viajando a diferentes rincones del mundo para descubrir nuevos misterios paranormales. Hellboy y la A.I.D.P. es una meta-serie en curso que consiste en one-shots y mini-sagas. Cada edición presenta un sistema de numeración interno impreso en la cubierta interior que indica el orden de lectura. En nuestro país este tomo representa el número #31 de la serie pero no dejan de ser tomitos indispensables a poco que te guste el misterio, lo paranormal y las series de acción. Otro conjunto de aventuras aleatorias de los viejos tiempos de la B.P.R.D. (como se llama este grupo originalmente).

En Lazos familiares, Hellboy y la agente de campo Sue buscan una copia de bolsillo de «Brujería y Demonología» de Gustav Strobl, un texto auténtico de prácticas ocultas. Por lo visto, se encuentra en un suburbio de Dayton, Ohio, donde una familia sufre porque uno de sus miembros está poseído.

En Vidas olvidadas, el profesor Bruttenholm y Hellboy se disponen a investigar un cementerio embrujado.

En El cielo se desploma, Hellboy y el criptozoólogo Woody Farrier se embarcan en una misión de campo para investigar el avistamiento de un platillo volador que ha dado lugar a un monstruo en un bosque cercano a un pueblo.

Simetría terrible, cuenta como el Chico Demonio visita a un viejo amigo de la universidad de Bruttenholm en la India e investigan algunos ataques de un posible hombre-tigre en un pueblo.

En Desde abajo, Hellboy, Bruttenholm y el agente Archie van a investigar un aserradero ruidoso y abandonado en Oregon. El lugar ha tenido avistamientos esporádicos y sonidos de lo sobrenatural.

Feliz año nuevo, cuenta como Hellboy asiste a una sesión espiritista de Nochevieja donde una médium estafadora, la titular Ava Galluci, es la invitada de honor.

Como veis, una colección de historias divertida que da para unas cuantas sentadas de lectura (o tan solo una). Sumad a esto unos geniales dibujos de Laurence Campbell, Stephen Green, Shawn Martinbrough, Alison Sampson, Mike Norton y Ben Stenbeck, y el color indispensable siempre de Dave Stewart y Lee Louhridge.

No solo para fans de Hellboy, cómics así son recomendables para cualquier lector de cómics.

Reseña: Hitler ha Muerto, de Brisard y Pagliaro

Esta historieta pretende contarnos las tribulaciones de la investigación soviética sobre la muerte de Hitler, en un contexto de rivalidad entre dos servicios secretos enemigos: el NKVD (que más tarde se convertiría en la KGB) policía secreta encargada de la seguridad interior y exterior, dirigida por Lavrenti Beria; y el SMERSH. organización creada desde cero por Stalin en 1943, encargada del contraespionaje militar, dirigida por Viktor Abakumov. Y es cierto que el SMERSH estaba oficialmente a cargo de la investigación sobre la muerte de Hitler, y que el NKVD intentó por todos los medios ponerle fin, pero puede crear controversia que este cómic de Jean-Christophe Brisard, recién publicado por Norma Editorial, apoye la tesis de que Beria se juega la vida en este asunto, lo cual fuera, en realidad, muy poco probable.

Pero lo que es más problemático es que Hitler ha muerto mezcla épocas para hacerlo todo más creíble: Beria, por ejemplo, se ve liberado de la responsabilidad del NKVD en favor del diseño de la primera bomba A (incorrectamente calificada como bomba H en la historia) durante el conferencia de Potsdam (julio de 1945), una especie de desgracia. Sin embargo, en realidad, a priori, no existe una relación de causa y efecto entre la desgracia real (aunque temporal) de Beria y la investigación sobre la muerte de Hitler. ¿Estamos ante una total ucronía entonces? Si te la tomas como tal, a sabiendas que ciertas cosas no ocurrieron tal que así, entonces sí que disfrutarás de este álbum de cómic europeo. En su día me pasaron La muerte de Hitler en los archivos secretos de la KGB, del mismo autor. En este ensayo, con la ayuda de Lana Parshina, Jean-Christophe Brisard investigó lo que sabían los rusos en 1945 sobre la muerte de Hitler y qué fue de su cuerpo. Esta investigación es fascinante, así que quizás por eso cogí tan encantado este título para reseñarlo. Por lo que encantado de profundizar en la adaptación al cómic realizada por el propio periodista.

Cómic donde seguimos a dos equipos y dos investigaciones sobre la muerte de Hitler llevadas a cabo por dos organizaciones de espionaje de la antigua U.R.S.S. Donde tenemos una lucha fratricida que se desarrolla ante nuestros ojos donde todo vale. El objetivo de cada organización es cumplir su misión para que su líder pueda brillar con Stalin y para que la gloria se refleje en ellos a través del flujo… El contexto del fin de la guerra también queda bien representado con los abusos cometidos por los soldados rusos o el intercambio de información fragmentaria entre los aliados.

El dibujo de Pagliaro encaja bien con la historia. Algunos de sus personajes tienen «bocas» y al instante sentimos simpatía o antipatía por algunos de ellos. Una cosa raruna de este cómic es que casi todas las viñetas de uno de los títulos están afectadas por una especie de semicírculo negro, dando la sensación de que ondas atraviesan el espacio y eso llega a calar el alma lectora sobremanera. Francamente, no entiendo el objetivo de esto en uno de los álbumes pero me afectó. Pero lo que sí tengo claro es que Hitler ha muerto hará las delicias de todos los aficionados al cómic histórico y/o a las investigaciones policiales elaboradas en grandes contiendas de nuestra historia bélica.

Amantes de la 2GM, deberíais conocer esto.